César Kibler (nombre artístico) es un joven originario de Apopa quien se destaca por pintar detallados rostros solamente con una herramienta: lapiceros. Y no necesita más.
Él se describe como autodidacta y relata que incursionó como “boligrafista” hace dos años.
“Puedo decir que el 20 por ciento de los conocimientos los adquirí en talleres de dibujo en la casa de la cultura, el resto ha sido formación por mi cuenta”, comenta, César, quien tiene 28 años.
Para elaborar cada obra dedica al menos 5 horas al día durante dos o más semanas. Inicia buscando el modelo, luego coloca la hoja de papel fabriano o cartulina bristol- entre otros- sobre la mesa (ese es el lienzo) y en otra prueba o mezcla los colores (es su paleta).
“El bolígrafo es mi medio de expresión artística, y en este momento estoy enfocado en dominar el mismo. Lo escogí también por su complejidad”, detalla César.
Los bolígrafos son relativamente convencionales, quizás la única particularidad que tienen es la tinta es a base de aceite, pero, igual se encuentran fácil en librerías.