Todos estamos expuestos a diversos riesgos, tanto a nivel personal como empresarial y para cada uno de ellos existe un seguro privado.
Pero de todas los seguros que ofrecen las 24 empresas legalmente autorizadas en el país, el de vida, el de automóviles y el de salud son los que más contratan los salvadoreños, de acuerdo con las cifras de la Asociación Salvadoreña de Empresas de Seguros (ASES).
El seguro de Vida es el que más adquiere la gente (26.06% del total) pero y está relacionado con el hecho de que este tipo de póliza sirve como garantía para amparar la mayoría de créditos en el sistema bancario.
El porcentaje también puede ser alto, debido a que algunas empresas brindan este beneficio a sus colaboradores, ya sea por una exigencia legal, en el caso de compañías de seguridad o de la construcción; o como una prestación adicional a los beneficios de ley.
En Asesuisa, una de las empresas aseguradoras, “las soluciones de Vida” representan el 33% del portafolio que ellos ofrecen.
Este tipo de póliza es de las primeras que se comercializaron en el país y representan un respaldo cuando el titular fallece ya que permite dejar protegidos a los beneficiarios.
Pese a su importancia, Carolina Peña, quien es presidenta de la Asociación Salvadoreña de Productores de Seguros (Aspros) y tiene cincuenta años trabajando en el mercado, señala que la mayoría de salvadoreños no consideran el seguro de Vida como una prioridad y no lo contratan de manera individual o por decisión propia.
“Yo no concibo personas sin seguro, pero el de Vida es el menos buscado, la gente prefiere proteger su auto, que ser previsor y optar por un seguro que proteja a su familia cuando muera”, explica.
Peña también señala que la decisión de contar con un seguro de cualquier tipo sigue siendo muy baja en el país. Bajo su experiencia cree que solo tres de diez salvadoreños en promedio, paga por una póliza privada.
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Además de ayudarte a presupuestar tus sueños y contestar, por lo menos, cuánto cuesta, cuándo lo quieres cumplir y cómo harás para lograrlo.
El de accidentes y enfermedades ocupa el segundo lugar entre los seguros más demandados. Según cifras de la Superintendencia del Sistema Financiero, a septiembre de 2018 las aseguradoras pagaron $66.3 millones por reclamos de este tipo de seguros, que tuvo un incremento del 2% respecto al 2017.
Datos de Asesuisa, señalan que las tres enfermedades más comunes a las que dan respaldo son las relacionadas con las vías respiratorias, seguidas por las del sistema digestivo y el cáncer.
Y entre los más afectados figuran profesionales entre los 30 y los 39 años, principalmente comerciantes, en segundo lugar abogados y en tercero, ingenieros. El 96% de los casos respaldados por esta aseguradora se sitúan en San Salvador.
Por su parte Linda Blanco, directora de Relaciones Internacionales de Aspros, asegura que la gente que adquiere cualquier tipo de póliza debe aprender, primero, a entender los requisitos y luego a usarla. Tener un asesor de seguros es clave, advierte.
“En el de enfermedades y accidentes personales, la gente comete errores. Por ejemplo, no declara afecciones preexistentes o cuando compra medicamentos no prescritos y quiere reclamarlos, la compañía no les responde”, explicó.
También, dice que hay que cuidar el máximo vitalicio que posee el contrato, y guardarlo para emergencias.
Otro aspecto esencial es tomar un seguro médico cuando se está sano y joven, por que el precio es menor, además hay un límite de edad (65 años) donde nadie puede tomar una póliza, pero si la persona ya está protegida, el seguro permanece con ella hasta que fallece.
El seguro de autos gana terreno
Dos de cada diez salvadoreños que deciden adquirir un seguro de cualquier tipo por decisión propia, optan por el de autos como primera opción, según datos de Aspros.
Cifras de la compañía Asesuisa indican que el reclamo más frecuente que gestionan es el daño parcial del vehículo.
En el caso de esta empresa, un 23% de sus clientes ha adquirido un seguro de autos, tanto clientes corporativos como personas individuales. En estas últimas, automotores es la solución de protección más solicitada en Asesuisa.
Por decisión propia es el seguro de autos el que está ganando terreno, insiste Peña.
La cifra de quienes tienen seguro de autos sigue siendo baja, considerando que en El Salvador se contabilizaron hasta septiembre de 2018, 3,288 accidentes de tránsito, según registros del Viceministerio de Transporte.
La ejecutiva sostiene que la cultura de prevención está muy poco arraigada en la población y que los clientes que llegan de manera personal a buscar este servicio, casi siempre preguntan por el de autos. Ese, dice, “se vende solo”.
“La gente no busca el seguro de vida. Si tiene que elegir, selecciona el de autos, aunque todavía hay muy poca cultura de prevención”, sostiene Peña.
Según Ases, un 18.8% del total de pólizas contratadas corresponde a seguros de auto, la cifra sigue siendo baja considerando que en El Salvador se contabilizaron hasta septiembre de 2018, 3,288 accidentes de tránsito, según registros del Viceministerio de Transporte.
Aunque el mercado ha crecido y cada vez más personas siguen llegando a las aseguradoras a solicitar estas pólizas, en general, hace falta todavía trabajar en la cultura de prevención.
“Tenemos un gran desafío. Yo llevo 16 años vendiendo seguros y sigue siendo duro convencer a la gente de la importancia de contar con uno. Para mí, cualquier persona que maneja debería contar con uno de autos como mandato de ley. Otros países ya obligan a los conductores a tenerlo”, explicó por su parte, Ernesto Herrera, vicepresidente de Aspros. Por ejemplo, Panamá aprobó en 2016 el seguro obligatorio de auto, y Costa Rica lo tiene vigente desde 2011.
En el país aunque ya existen esfuerzos para aprobar una ley similar, todavía sigue sin aprobarse y eso provoca que la cultura de prevención no cobre fuerza. Cada entidad relacionada con el rubro debe hacer conciencia de ello.