Los libros y útiles que acompañaron a los salvadoreños a través del tiempo Los útiles escolares de la época de los 80 - 90 son considerados clásicos y generan nostalgia entre los salvadoreños que aprendieron con estas herramientas de estudio.
Por Fotografia
2019-01-08 10:07:04
El silabario hispanoamericano fue publicado en 1945? por el pedagogo chileno Adrián Dufflocq Galdames, y fue el encargado de alfabetizar a varias generaciones latinoamericanos, en El Salvador fue todo un clásico. Foto/Cortesía
Los Trapper Keeper eran un folder de encuadernadora de hojas sueltas creada por Mead. Popular entre los estudiantes de los Estados Unidos, Canadá y partes de América Latina. Foto EDH/Cortesía
El famoso borrador de lápiz y de tinta, aunque en la mayoría de ocasiones terminaba rompiendo la pagina del cuaderno. Foto EDH/Cortesía
Es un libro del matemático y profesor cubano Aurelio Baldor. La primera edición se produjo el 19 de junio de 1941. El texto de Baldor es el libro más consultado en escuelas y colegios de Latinoamérica. El Álgebra de Baldor tiene 5,790 ejercicios en total, que equivalen a 19 ejercicios en cada prueba en promedio. Foto EDH/Cortesía
El compás de hierro y una peligrosa punta de acero, en aquel tiempo las medidas de seguridad eran pocas. Foto EDH/Cortesía
El almanaque de Bristol por su popularidad es mencionado por varios escritores hispanoamericanos destacados como parte de lo cotidiano o como referencia y fuente de consulta común de los personajes de novelas y cuentos. Foto EDH/Cortesía
Las mochilas de cuero o de tela que se ocupaban en los 80. Foto EDH/Cortesía
El increible Hulk y la tradicional lonchera de hierro con termo de la misma temática. Foto EDH/Cortesía
Las sacapuntas para lápiz de plástico con figuras color, lo innovador de los 90. Foto EDH/Cortesía
Calculadora Casio Memory, ocupaba 2 pilas de 1.5 voltios AA. Foto EDH/Cortesía
El tradicional abaco para aprender a contar por decenas, centenas y unidades de millares. Foto EDH/Cortesía
El método Palmer de caligrafía comercial desarrollado y promovido por Austin Norman Palmer a finales del siglo XIX y principios del XX. Miles de salvadoreños tienen buena caligrafía luego de practicar en este libro. Foto EDH/Cortesía
Las loncheras de aluminio de los Thundercats se pusieron de moda. Foto EDH/Cortesía
Los cuadernos de caligrafía Monza de la Dra. Ondina Montoya Basulto. Foto EDH/Cortesía
Las clásicas tablas periódicas para bachillerato. Foto EDH/Cortesía
Los borradores con escobillas incorporadas. Foto EDH/Cortesía