Foto EDH/Jessica Orellana
“Parte de mi familia y mi madre no estaban de acuerdo, mi madre siempre me decía que en la familia no habían payasos” cuenta Camilo.
Pero Camilo reconoce que a él siempre le gustó trabajar con niños, fue maestro en una escuela dominical de la iglesia a la que asistía y luego se perfiló como payaso para fiestas infantiles.
Además de personificar al payaso “Nino”, en temporada navideña Camilo es muy solicitado para caracterizar a un duende de Santa Claus. Pero el personaje que él reconoce que solo lo ha caracterizado una vez y que desea hacerlo con mayor frecuencia, se llama Tyrion Lannister, de la serie ‘Game of Thrones’, interpretado por el actor Peter Dinklage, quien es de estatura pequeña.
Además de la pasión por los niños, Camilo dice que la falta de oportunidades laborales lo hicieron abrazar con más razón a su personaje “Nino”.
“En muchas ocasiones me decían ‘mira, te vamos a llamar’… Quizá porque piensan que uno no tiene la capacidad de hacer cierto trabajo y en nuestro entorno nos excluyen de poder realizar un trabajo. No nos daban la oportunidad para demostrar que podíamos a pesar de la estatura”, señaló Camilo.
Te puede interesar:
FOTOS y VIDEO: La increíble transformación de dos salvadoreños que interpretan personajes de películas
Buchinche Colectivo es una pareja de esposos que se encargan de diseñar e interpretar diferentes personajes de fantasía.
Eso ya no es problema, porque con sus personajes ameniza cumpleaños, bodas temáticas, brinda servicios de animación, activaciones de marcas, entre otros servicios. “(Ahora) Me siento bien y trato de hacer lo mejor posible para mantener la cartera de clientes y el trabajo no me falte”, aseguró.
Aunque en este último año Camilo se dedicó a su faceta como artista, también ha logrado adquirir experiencia en la reparación de celulares, dicho oficio en alguna medida le ha ayudado para autosostenerse.
“Soy edición limitada”
Camilo es el único hijo varón en su familia; su padre, de nacionalidad Belga, decidió quedarse en El Salvador y hacer familia con la madre de Camilo, sin embargo su progenitor murió cuando el artista tenía sólo ocho años.
Nadie en su familia paterna y materna tiene antecedentes hereditarios de baja estatura. Camilo intentó investigar un poco con su familia en Bélgica, y se dio cuenta que él ha sido el único caso. “ Soy una edición limitada en mi familia”, dice entre risas.
Foto por Jessica Orellana
Pero, ¿cómo fue la infancia de Camilo? Enfrentar el acoso infantil fue muy difícil para Camilo, porque a pesar de estudiar en un colegio católico, sus compañeros lo molestaban y se burlaban de él.
Te puede interesar:
La impresionante transformación de un artista salvadoreño en personajes de Johnny Depp
El salvadoreño Carlos Cordova tiene 10 años de caracterizar personajes a los cuales el actor estadounidense Johnny Depp da vida en la pantalla grande, la representación es un verdadero reto el cual él ha dominado.
Reconoce que su infancia fue difícil y gracias a sus padres pudo avanzar. “Nací quebrado de la columna, aprendí a caminar a los tres años, usé zapatos ortopédicos”, dijo.
Este proceso lo hizo vulnerable a las burlas de sus compañeros y hasta de sus vecinos, de tal forma que el doctor recomendó que al pasar a primer grado y en beneficio de una mejoría en su desarrollo psicomotor, sería necesario cambiarlo de institución educativa.
“Mi vida fue una normal, no hubo preferencias, que aunque de niño no se saben asimilar, las preguntas igual llegaron a mi mente. Sufrí de todo. Yo me frustraba llegaba un momento en el cual yo me encerraba en el cuarto y lloraba”, recordó.
Foto EDH/Jessica Orellana
Pero eso fue circunstancial, ya que Camilo reconoce que llegó un momento en que llevó a la acción la famosa frase: “si no puedes con tu enemigo, únete”, y empezó a “ser más malilla”, empezó a conocerse cómo era él y empezó a molestarse él mismo.
“Cuando ellos (sus compañeros) notaron eso, el acoso bajó. Fue una prueba superada, hasta el sol de ahora ya no me afectan ni las bromas”, aseguró.
Al presentar sus show como el payaso “Nino” en festejos infantiles, Camilo se ve obligado a responder creativamente a una de las preguntas más frecuentes entre los pequeños. ¿Por qué es tan chiquito?
“Los niños de dos o tres años solo me ven con admiración y extrañeza, pero los niños más grandes suelen preguntar “¿mamá, por qué el hombre es chiquito?”, y a veces es complicado responderles, yo generalmente les digo: “porque no comía frutas ni verduras”, concluyó.
Foto por Jessica Orellana