Las piezas de arte siempre han sido de gran interés por su incalculable valor. Recapitulamos hurtos de grandes pinturas y de algunas que nunca fueron encontradas; pero tras los incidentes, reafirmaron su estatus de “míticas”.
Las pinturas más famosas en la historia del arte siempre han sido objeto de deseo, ya sea para quien aprecia verdaderamente el arte, para los coleccionistas y por su puesto para aquellos que se mueven en el inframundo del mercado ilegal que factura millones de dólares con ellas.
¿Alguien puede creer que una obra de arte puede ser extraída de un museo con grandes medidas de seguridad? Ha sucedido. Recintos de gran renombre han sido vulnerados por grupos armados, por guardias de seguridad infiltrados, por mafias… ¡en fin! Ladrones que otorgaron —aún más— un valor legendario a dichas piezas.
Hacemos un recorrido por atracos de cuadros valiosísimos y que pusieron en alerta a sus sedes:
1. “Amapolas”:creación del holandés Vicent van Gogh. Esta pintura fue hurtada del Museo Mahmud Jalil, en el Cairo, Egipto, en agosto de 2010. A pesar de las 43 cámaras de seguridad y un sistema de alarmas, los autores pudieron sustraer el cuadro valorado en $50 millones. El experto en arte impresionista y subastador Conor Jordan señaló que la obra fue creada en 1887 y marcó un “viraje en el estilo de pintar de Van Gogh”.
Dos veces robada
La primera vez que “Amapolas”, un lienzo de 65 x 54 centímetros que representa un florero con amapolas amarillas y rojas contrastadas contra un fondo oscuro, se sustrajo del mismo refugio artístico fue el 4 de junio de 1977. La recuperación se dio diez años después, en Kuwait.