Solo los recuerdos quedan de El Teleférico San Jacinto, ubicado en la cima del cerro del mismo nombre, donde había servicio de restaurantes, juegos mecánicos y diversión.
El parque fue inaugurado el 4 de noviembre de 1977 con el nombre de “El reino del pájaro y la nube”, como lo bautizó su fundador Antonio Bonilla, en alusión al poema Ascensión, del escritor salvadoreño Alfredo Espino.
El complejo, compuesto por siete manzanas en la parte inferior y 20 manzanas en la parte superior, se convirtió en un símbolo del sano esparcimiento en El Salvador.
Las góndolas, los carros chocones, carruseles, el pulpo, el gusanito, un tren y restaurantes, entre otros, eran parte del entretenimiento que ofrecía el lugar. El ratón Chito Pérez, el conejo y Ala Perica daban la bienvenida a los visitantes.