A Izalco lo envuelve un velo de misticismo. Sus ancestrales tradiciones, muchas de ellas relacionadas con la hechicería y lo sobrenatural, le han dado la fama no solo a nivel nacional sino también internacional.
Esa población, marcada por la historia y que otrora fuera uno de los más grandes asentamientos indígenas de El Salvador, aún conserva intactas muchas de sus costumbres. Sus pobladores son quienes se han esmerado por mantenerlas vivas a pesar del inexorable paso del tiempo.
Muestra de ese esfuerzo será la tercera edición del Festival Izalco Místico, que se llevará a cabo el sábado 27 y el domingo 28 de octubre en los alrededores del parque principal de este municipio, del departamento de Sonsonate.
Los indígenas de Izalco rinden homenaje a la memoria de Macario Canizalez, un brujo que según la tradición nació y murió en México y posteriormente reencarnó en Cuyagualo.
En esta jornada los turistas tendrán la oportunidad de vivir de cerca sus coloridas tradiciones, sobre todo las relacionadas con el Día de los difuntos.