Extrañas sensaciones sacuden el cuerpo cuando una persona experimenta la ausencia de una parte que siempre ha estado ahí, desde un pequeño diente hasta una pierna. ¿Por qué sucede? ¿Es algo que el cerebro no puede controlar porque está confundido? ¿Por qué las sensaciones son tan reales?
La Clínica Mayo describe el “Dolor fantasma” como el que genera una parte del cuerpo que ya no existe. “Los médicos antes creían que este fenómeno tras a una amputación era un problema psicológico, pero los expertos ahora reconocen que estas sensaciones reales se originan en la médula espinal y en el cerebro”, asegura la institución.

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El trastorno surge después de una cirugía para amputar alguna parte del cuerpo como la extirpación de un seno, el pene, un ojo o la lengua, pero es más frecuente en quienes pierden un brazo o una pierna. Afortunadamente la sensación mejora con el tiempo sin tratamiento o con ayuda de un médico con terapias.

La anestesióloga Myriam Hincapié reconoce que quienes experimentan este malestar pueden desarrollar otro tipo de dolor después. Así mismo pueden sufrir más cuando la parte amputado está infectada porque los nervios y las estructuras de la médula espinal sienten esas molestias y reaccionan.
Las características del dolor fantasma suelen ser:
* Sensación de dolor que aparece y desaparece a menudo.
* Surge en los días posteriores a la amputación.
* Puede describirse como un disparo, una puñalada, una perforación, apretujón, pulsación, frío o ardor.
* Sensación de que la parte fantasma está en una posición incómoda.
* O presión en esa zona, además de estrés emocional.

“Cuando se pierde una parte del cuerpo, el cerebro tiende a reorganizarse de tal forma que el área encargada de sentir y mover el miembro amputado sigue siendo activada por otras áreas cerebrales, lo que permite crear una imagen irreal pero como si estuviera funcionando”, indicó Hincapié.
Las neuronas del miembro amputado no mueren, se activan con estímulos inconscientes y proporcionan información al cerebro. Le hacen entender que ese brazo o pierna todavía están conectados al cuerpo, eso genera dolor.
¿QUIÉNES SIENTEN MÁS DOLOR?
La Clínica Mayo, como otros expertos en salud, todavía no comprenden por qué algunas personas sufren más del dolor fantasma que otras. Sin embargo los futuros afectados pueden segmentarse por:

– Aquellos que sufren antes de la amputación. Regularmente el cerebro de estos individuos retiene en la memoria el dolor y continúa enviando señales de eso al cuerpo.
– Los que padecen dolor de muñón. También se le puede considerar dolor imaginario. Se debe al crecimiento anormal en las terminales nerviosas dañadas.
– Quienes llevan prótesis y no está ajustada correctamente. Es común que experimenten malestar, la solución es obtener el ajuste adecuado de la extremidad artificial.