Los Jesusitos de Ahuachapán: una tradición centenaria
En 1855 fueron repartidas tres centenas de imágenes de Jesusitos; actualmente hay registro de apenas 45 figuras. Muchos se niega a que la tradición de los Jesusitos desaparezca, luego que fuera iniciada hace 163 años por el entonces párroco de la cabecera.
Santiago Presidente, una de las personas que tienen más tiempo con la devoción de los Jesusitos. Él, su esposa y Belarmino Aguirre se encargan de recibir las imágenes en la iglesia. Foto por Cristian Díaz
Jesusito proveniente del cantón El Barro, de Ahuachapán. Su propietario, Carlos Morán, relató que mandó a tallar al Dulce Nombre de Jesús hace cinco años, por el enamoramiento que tiene hacia Jesús Nazareno. Foto por Cristian Díaz
Uno de los pocos Jesusitos que aún existen es el que se encuentra en el colegio Josefino, de Ahuachapán. Foto por Cristian Díaz
La principal características de las imágenes es que están con la cruz a cuestas, aunque hay algunas figuras que no presentan dicha situación. Foto por Cristian Díaz
La llegada al templo es con música de pito y flautas de bambú; además de tambores de cuero crudo y cohetes de vara. Foto por Cristian Díaz
Los Jesusitos son colocados en un altar del ala norte de la iglesia Nuestra Señora de la Asunción, mientras se realiza la misa principal de las fiestas ahuachapanecas. Foto por Cristian Díaz
Antonia Pineda, de 85 años y residente de la colonia La Gloria, en Ahuachapán, tiene a su Jesusito desde hace unos 58 años. Foto por Cristian Díaz
Muchos Jesusitos son llevados acompañados de música y alabanzas, como antiguamente se realizaba. Otros son llevados modestamente sólo son acompañados por quienes los cuidan. Foto por Cristian Díaz
Lilian de Juárez muestra el libro que data de 1969, para anotar la asistencia de los Jesusitos y las ofrendas económicas que llevan los feligreses, usadas en mejoras de la parroquia. Foto por Cristian Díaz