Además del grupo de extermino condenado ayer, la Fiscalía General de la República (FGR) sigue dos procesos contra policías y militares acusados de homicidios de pandilleros y personas sin vínculos con estos, ocurridos en el oriente del país.
En uno de los casos, 12 personas son imputadas de los delitos de agrupaciones ilícitas, conspiración de homicidios, homicidios agravados y privación de libertad.
Entre los acusados están un inspector policial, un subinspector, un cabo y tres agentes, también seis personas particulares.
De acuerdo con las investigaciones, los jefes policiales participaban localizando los sitios para cometer los homicidios y que en esa zona no hubiese presencia de fuerzas de seguridad, y los agentes supuestamente fueron los que ejecutaron los asesinatos.
En el otro grupo, son procesados un jefe, un agente y motorista de la Policía, 15 soldados y 34 civiles, quienes son acusados de participar en 36 homicidios que habrían cometido entre 2014 y 2016.
De todas las víctimas, según la FGR, nueve no tenían ninguna relación con pandillas.
En su momento el Ministerio Público sostuvo que investigarían si los imputados también habrían participado en las masacres que ocurrieron en el oriente del país a inicios del año pasado.