Alianza no tuvo compasión de Audaz

Alianza volvió a ganar, fue su quinto triunfo consecutivo y ahora va a la caza del récord de FAS que es de 33 juegos invictos

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Por Raúl Recinos

2018-02-04 6:31:29

No hay quien pare al Alianza. El equipo paquidermo dio otro paso importante al doblegar 2-0 a un Audaz que no encuentra la brújula en este torneo. Ahora, la mirada esta puesta en FAS, rival del próximo jueves que de salir con un empate, lo igualarían en la marca de 33 juegos sin perder.

Los paquidermos se presentaron al juego ante los vicentinos con un esquema diferente (4-3-2-1), estaba ante el último lugar de la tabla y pensando más en el juego del próximo jueves contra FAS. Por eso, Jorge Rodríguez, técnico de los albos, decidió guardarse a Rodolfo Zelaya, su delantero estelar, aunque sí estuvo Gustavo Guerreño en el ataque.

En los primeros 10 minutos Alianza tuvo sus primeras aproximaciones al arco de Josué Coreas, primero en una jugada individual de Alex Larín, pero no rindió sus frutos. Después, Guerreño se metió entre un zaguero y el guardameta, logró puntear el balón pero sobre la línea reventaron el balón por el lateral. Ese error de comunicación casi lo paga caro la visita.

Al 24?, la primera escapada de Audaz por medio de Cristian Sánchez Prette por el flanco izquierdo, cuando do pateó se barrió Henry Romero y la pelota le chocó en la mano. Marlon Mejía, árbitro central, no dudó en señalar el punto de penalti.

Edwin Benítez, con pasado en el equipo capitalino se encargó del cobro. Se la picó a Victor García, pero el meta charrúa no se venció y lo tapó con una mano, le dejó el balón, otra vez, en las piernas a la “Rata”, pero de nueva cuenta el portero evitó el gol para convertirse en el héroe hasta ese momento.

Los aplausos bajaron de las gradas para el equipo, estaban metidos en el medio campo de los coyotes y dominando el juego a su antojo. Larín tuvo otra gran chance con un riflazo que Coreas envió al tiro de esquina, tras un pase largo desde la derecha de Marvin Monterrosa.

Los vicentinos estaban jugando solo con Santos Guzmán en el frente, solo había tenido una escapada y mandó el centro, pero no lo acompañaron. Jugaban lejos del área de los blancos, cosa que era buena noticia para el campeón.

Cristian Sánchez Prette tenía un juego incómodo, las marcas de Narciso Orellana y Rodrigo Rivera lo tenían atado y en cinco fechas le sigue debiendo al fútbol, por lo que mostró hace unas campañas con la camisa de Águila.

Como los paquidermos seguían metidos en el medio campo de Audaz, parecía cuestión de tiempo para que abrieran el marcador y encaminarse a su partido 32 sin conocer la derrota, y quedar a un empate o victoria de igualar lo que hizo FAS al final de la década de los setentas.

Ni Larín ni Guerreño, que eran los que más insistían, tuvieron la suerte de perforar la meta del benjamín de la liga. Pero Jonathan Jiménez sí, con un derechazo raso que pasó enmedio de muchas piernas y Coreas no tuvo la fortuna de detener el disparo.

Audaz estaba en problemas, más serios para el timonel Misael Alfaro, que con un traspié más ponía se ponía en juego si trabajo. De hecho, a este compromiso llegaba en la cuerda floja, ya desde la fecha anterior se ponía en duda su continuidad.

Con ese gol se fueron tranquilos al descanso, a decir verdad Audaz no les estaba representando tantos problemas, pero la visita si estaba obligada a llevarse, al menos, un punto a casa, ya que son sotaneros en la tabla del Clausura y están cerca de las últimas casillas en la acumulada.

Contundentes

Los vicentinos arriesgaron primero, no podían darse otro lujo de perder, y fueron valientes porque estaban ante el campeón invicto, que tiene más de siete meses de no perder en un juego de Primera.

Las primeras variantes de Misael Alfaro fueron ofensivas, no le tuvo miedo a quedar descubierto en la parte de la defensa. Mandó a Levi Martínez y Jaime Flores para tener más presencia en ataque y tirar el juego por el corredor derecho, el ímpetu de Flores fue en los primeros minutos, pero después Jiménez lo mantuvo bien marcado.

El “Zarco” también quería más, no estaba dispuesto a ningún sobresalto y mandó a Óscar Cerén y Fito Zelaya en primer momento. Además le servía para guardarse unas piezas para que tuvieran descanso, ya que entre semana tendrán un juego importante antes los asociados.

El 22 entró decidido a poner en más ventaja a su equipo, pero llegó pasado de revoluciones y mandó a la décima grada su primer disparo tras un pase de Monterrosa. Después tuvo dos más, la primera se la desvió Coreas y la otra se fue a un costado.

Rodolfo Zelaya se encargó de sellar la victoria sobre el minuto 90 con un pase de Juan Carlos Portillo que casi solo llegó a empujar el capitán de los blancos.