???El domingo antepasado ajusté 102 años, hoy tengo 11 días más???

El anciano usuluteco trabaja en la venta de billetes de lotería en el municipio de Santiago de María

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Por Iliana ??vila

2018-01-02 6:56:56

Guadalupe Ibarra Guzmán tiene cinco años de vender lotería y 102 años de edad.

La jornada laboral de Guadalupe inicia a las 6:00 de la mañana. Su paso es lento, sin embargo tiene suficiente energía para recorrer las principales calles del centro del municipio de Santiago de María, en Usulután.

Su ruta también abarca las instalaciones del Hospital Nacional “Dr, Jorge Arturo Mena” y del Instituto Salvadoreño del Seguro Social.

El centenario usuluteco, de estatura media, delgado y un poco encorvado, carga a todos lados un maletín de lona, en donde guarda los vigésimos de lotería y los de lotín.

Con tono de vos suave y su amabilidad, el anciano consigue que los comerciantes del Mercado de Santiago de María inviertan, cada día, entre 1 y 2 dólares en “raspar ” para buscar un premio.

“Es un señor admirable por el trabajo que hace y por los años que tiene, es raro ver que señores de esta edad estén trabajando de esta manera. Nosotros a él lo apreciamos porque sabemos que su trabajo lo hace con mucho amor”, comentó Jeny Elizabeth Pablo, comerciante.

Don Lupe, como es conocido, asegura que nació el 17 de diciembre de 1915, en el municipio de Jucuapa, Usulután.

“El domingo antepasado ajuste 102 años, hoy tengo 11 días más” comenta sonriente.

Sin embargo dicha fecha no pudo ser comprobada debido a que extravió su Documento Único de Identidad, pero existen personas en la ciudad que dan fe de la longevidad del usuluteco.

“Yo tenía siete años cuando lo conocí, creo que el ya tenía unos 30 años cuando trabajo en Caminos, formaba parte de las cuadrillas que dirigía mi papá”, comentó María Cristina Vásquez de Hernández, de 75 años.

Guadalupe recuerda que trabajó entre 35 a 45 años en carretera, y a causa de ese trabajo recorrió varios lugares del país, “de todo he trabajado menos de albañil, ni de motorista, porque no sé”, explicó.

Pareciera que el caminar siempre ha sido uno de sus fuertes, antes de vender lotería, vendió periódicos por 16 años, siempre recorriendo las empinadas calles de Santiago de María.

“Yo no sufro de enfermedades, en mi vida solo tres veces me enfermé, y luego que me operaron de una hernia ??? quizás la alimentación y caminar es bueno” dijo.

A sus 102 años, cuenta con su esposa de 85 años, tres hijos y “una carretada de nietos y bisnietos”, como él dice; con los que convive en el municipio de Tecapán, donde reside y al que regresa a las 4:00 de la tarde cuando termina su jornada del día.

Cuando Don Lupe cumplió los 100 años, uno de sus hijos le hizo una pequeña celebración, así como sus clientes del Hospital Nacional de Santiago de María, quienes también le celebraron su cumpleaños.

“Los doctores me ponen de ejemplo en el hospital”, comentó ya entre lagrimas, posiblemente de la emoción al reconocer el aprecio de las personas.