El Ministerio de Salud reportó 117 casos de personas quemadas con pólvora, entre adultos y niños, registrados desde el 1 de noviembre al 1 de enero a las 6:00 de la mañana.
De ese total, 40 personas se quemaron con pólvora prohibida, informó el viceministro de Políticas de Salud, Eduardo Espinoza.
En ese mismo lapso, hubo 17 menores de 18 años quemados; de esa cifra 14 fueron atendidos en el hospital Bloom, pero solo cinco se quedaron ingresados.
Los casos más recientes fueron dos ocurridos la noche de fin de año. Se trata de un niño de 9 años, procedente de San Miguel, que se quemó la mano derecha y el abdomen con un mortero. El otro caso es el de un menor de 8 años, de Sonsonate, que se sufrió quemaduras en el ojo izquierdo con una estrellita.
En cuanto al tipo de lesiones de los 117 casos, Espinoza explicó que la mayoría fueron en las extremidades inferiores, 26 personas con quemaduras en manos y 18 en dedos; 12 sufrieron lesiones en los ojos, y 19 en otras zonas de la cabeza.
De los cinco menores quemados y hospitalizados durante la temporada de fin de año, el más grave de ellos fue un menor que llegó con los genitales casi calcinados, declaró Espinoza.
En comparación de 2016, cuando hubo 15 niños quemados, según reportes del Plan Belén, las autoridades explicaron que hubo un 10% menos de casos.
Verónica Villalta, directora de Fosalud, opinó que la única manera de que ya no haya niños quemados en el país es prohibir definitivamente la pólvora, ya que esta no es segura, y muchos padres no vigilan a sus hijos cuando están manipulando pirotécnicos.
En el occidente del país, hubo dos adultos y un menor de edad lesionado por pólvora, quienes fueron atendidos en el hospital Jorge Mazzini de Sonsonate. El más grave de ellos fue Luis Alberto Cerén, de 38 años, a quien tuvieron que amputarle un dedo de la mano derecha.
En cuanto a la posibilidad de hacer denuncias ante la Fiscalía General de la República (FGR) por los casos de los niños quemados con pólvora, Espinoza manifestó que son delitos de acción pública y que el Código Procesal Penal, en su artículo 265, establece la obligación de los funcionarios, en el ejercicio de sus funciones, los que deben actuar.
“El Fiscal General de la República, no puede eximirse de esa responsabilidad. Nosotros no pedimos que otro haga nuestra tarea, al Minsal le toca prevenir las quemaduras y atender a los quemados, no nos toca investigar el delito. La Fiscalía General de la República debe actuar de oficio”, dijo Espinoza.