Persiste polémica por 17 mujeres condenadas por matar a bebés

Algunas ya recobraron su libertad (dos de ellas recibieron indulto), otras continúan pagando condenas de hasta 40 años.

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Un custodio destacado en Cárcel de Mujeres, Ilopango, y que sujetos armados lesionaron en Nahuizalco, Sonsonate, murió hace pocos minutos. FOTO ILUSTRACI??N.

Por Violeta Rivas

2017-06-17 8:00:04

Desde el 2014 diversas organizaciones feministas iniciaron una campaña en defensa de 17 mujeres que fueron acusadas de asesinar a sus hijos recién nacidos y, posteriormente, condenadas por homicidio agravado. La campaña ha sido catalogada por instituciones que defienden la vida desde la concepción, como un intento de despenalizar el aborto.

Miguel Fortín Magaña, quien en esos años fungió como director del Instituto de Medicina Legal (IML), opinó que, sin hablar como un activista pro vida, que en todos los casos que defienden las feministas los forenses llegaron a determinar que los recién nacidos fueron asesinados.

De las 17 condenadas por homicidio agravado, dos recibieron el indulto o perdón (ver explicación en recuadro) por la Asamblea Legislativa, previo a conocer un informe favorable que les envió la Corte Suprema de Justicia.

“Cuando se demostró que estaban por homicidio agravado, se cambió el título de la defensa y se comenzó a insistir que se trataba de complicaciones obstétricas”, indicó Fortín Magaña.

El médico explicó que, por medio de las autopsias, el IML determinó que fueron asesinados.

Los resultados de las autopsias llevaron a la institución a quedar “en el ojo del huracán” y, al final, el colectivo que las defendía determinó que el enemigo número uno tendría que ser Medicina Legal, agregó.

Por su parte, Katya Recinos, abogada del Colectiva Feminista y quien tramita nueve de las 17 peticiones de indultos, explicó que realizaron investigaciones donde encontraron que, entre el 2000 y 2011 hubo 129 mujeres que fueron procesadas por homicidio agravado: “de ese universo se identificaron que había 17 expedientes judiciales que podían solicitarse a la Asamblea Legislativa, los 17 indultos, y de acá nació la plataforma por Las 17”.

Las organizaciones feministas que apoyan la campaña han manifestado que las mujeres condenadas son pobres, que han recibido poca educación. A esto se suma que tuvieron problemas obstétricos y no supieron qué les estaba sucediendo al momento del nacimiento de sus hijos y que sufrieron abortos espontáneos, además, de confundir los síntomas con necesidades fisiológicas.

Uno de estos casos es el de Guadalupe, una de las procesada que recibió el indulto en enero del 2015, un caso en el que la Corte Suprema de Justicia encontró inconsistencias al no determinarse en el expediente cómo había fallecido el recién nacido, y donde tampoco se comprobó que había cometido homicidio agravado, dijo Recinos.

“Todos estos procesos, de las 17, inician con una denuncia y luego van detenidas del hospital a la cárcel. (Las procesadas) inician con emergencias obstétricas y tienen el parto fuera del hospital. A la hora que ellas piden un auxilio al 911 las llevan a los hospitales nacionales; pero abajo de todo el historial clínico aparece: avisar a la Fiscalía y a la Policía Nacional Civil. Entonces inician la persecución penal por el indicio de aborto, (…) y arbitrariamente cambian la tipificación de aborto a homicidio agravado”, explica Recinos.

Pero Fortín Magaña está convencido que eso no es así y aseguró que “realmente el caso empezó hablándose que estaban presas por aborto, cuando fue evidente que no había ninguna de estas 17 personas presas por aborto, sino que estaban presas por homicidio agravado en menor incapaz”.

La portavoz del movimiento VIDA SV, Sara Larín, tilda la campaña que mantiene el Colectivo Feminista como “un fracaso” porque mintieron alegando que en El Salvador las mujeres reciben condenas de 50 años de prisión por abortos espontáneos, cuando los delitos que cometieron son homicidios.

“La sociedad debe darse cuenta que la campaña era falsa, y se confirmó que el aborto natural no está penalizado, que la condena máxima por abortar son 8 años y que Las 17 estaban condenadas por homicidio” dijo Larín.

Agregó que los 17 casos son manipulados por las feministas y ninguno tienen relación con la ley que penaliza el aborto, ya que ninguna de ellas fue procesada por ese delito, sino que por homicidio agravado. Con la campaña a favor de las mujeres condenadas lo que quieren es despenalizar el aborto, aseguró.

“La liberación de cualquiera de estas mujeres es un precedente jurídico de que el Estado salvadoreño deja en libertad a mujeres condenadas por homicidio, no por aborto”, enfatizó la portavoz de VIDA SV.

Larín insistió en que las víctimas de “Las 17” eran cadáveres de bebés recién nacidos que respiraron antes de morir, lo que significa que estaban completamente formados, nacieron, vivieron y luego fueron asesinados.

Sobre el polémico tema la ministra de Salud, Violeta Menjívar, ha opinado que la despenalización del aborto no debe de ser de forma indiscriminada, sino en casos donde la vida de la mujer esté en peligro.

En la Asamblea Legislativa se encuentran propuestas de reforma penal para permitir el aborto ectópico, eugenésico y ético.

“No se trata de una pobre flor”

En noviembre del 2014, la Corte Suprema de Justicia emitió un informe favorable, con el cual la Asamblea indultó a Mirna R. Ella había sido condenada en 2003 a a 12 años y seis meses de prisión por el homicidio de su hija recién nacida, explicó Katia Recinos.

El indulto de Mirna R. fue promovido por el movimiento “Una Flor Por Las 17”.

“Fíjese bien que no estoy diciendo que ellas fueron o no culpables, porque eso no me consta a mí. Lo único que yo estoy diciendo es que hubo 17 homicidios agravados. Lo que hace el Instituto de Medicina Legal es que ve un cadáver, y con ese cuerpo Medicina Legal dice esta persona murió de tales y tales razones”, enfatizó el médico.

Fortín Magaña explicó que cuando un bebé nace, llora y los alvéolos se expanden, lo que les causa dolor; al producirse esta reacción también cambian el color de los pulmones y el intestino. Todos esos aspectos fueron establecidos en los 17 polémicos casos, lo que significa que las víctimas habían tenido vida extrauterina, propia de los recién nacidos, explicó.

“A un niño le enrollaron un delantal; al otro niño, agarraron un cuchillo y lo empezaron a acuchillar, le cortaron el corazón en pedazos; a otro niño, agarraron una piedra y le reventaron la cabeza con la piedra. Entonces lo que yo le quiero decir es que quien haya sido, que es lo que yo dije la vez pasada, es un asesino desalmado”, insistió el médico.

Explicó que no puede asegurar que las mujeres que están condenadas por homicidio agravado hayan sido las que cometieron en delito porque no estuvo presente durante el proceso judicial, “pero no se trata de una pobre flor que languidece sola en la cárcel, como lo han querido expresar”, cuestionó quien fue el director del instituto forense.

“Creo en Dios, no estoy de acuerdo con el aborto, pero esto no tiene nada qué ver con esto. Esto debe quedar muy claro, yo no estoy hablando como ningún activista pro vida. (…) Hay que aclarar que no se trata de una complicación obstétrica sino que los niños respiraron al nacer”, reiteró Fortín Magaña.

En el caso de Guadalupe, Katia Recinos expresa que le otorgaron el indulto porque había dudas en las pruebas presentadas en el proceso penal, específicamente en la autopsia, en los dictámenes de medicina legal porque no se comprobó cómo había fallecido su hijo.

“Si es cierto que, porque yo no sé si es cierto que ellas hayan sido las victimarias; pero quien haya asesinado a esos niños, es un asesino o asesina desalmado”, insistió.

Los procesos de indulto continúa, indicó Recinos, ya que además a los casos de las 17 se les han sumado otros nuevos, por lo cual ahora la plataforma se es denominada las 17+.