Tres niñas corren en el terreno árido que ha quedado en donde antes estaba la laguna de Atescatempa, ubicada en el municipio de Jutiapa, Guatemala.
Tras secarse la laguna de Atescatempa los niños suelen ir a jugar en el terreno vacío.
El viento arrastra las conchas de mejillones y caracoles en el terreno árido.
Don Cristino Jiménez, a sus 75 años de edad, se para frente a la laguna y lamenta el problema. Asegura que en un período de 14 años es la segunda vez que le ocurre esto al humedal.
Dos mujeres de la aldea La Ceiba presentan los platillos que han aprendido a preparar para mejorar la nutrición de sus hijos.
Los alimentos comunes son enriquecidos con incaparina y hierbas naturales para mejor las condiciones de peso de las familias con desnutrición.
El cambio climático afecta a las poblaciones más vulnerables, una de ellas es la aldea La Ceiba, de origen Maya-Chorti, al sur de Guatemala. En donde este año se registra la muerte de dos niños por desnutrición aguda.
Según la Mancomunidad Trinacional Río Lempa, las comunidades indígenas son las más vulnerables al cambio climático.
Este año en Citalá, se registró la muerte de un joven de 17 años por intoxicación con glifosato. Un agricultor de la zona muestra los abonos orgánicos que han hecho para evitar el uso de químicos.
Un agricultor muestra las mandarinas orgánicas de su parcela.
Para las familias que viven de la agricultura los huertos caseros ayudan a tener diversificada su dieta en tiempos de sequía.