El consumo de tabaco provoca no solo las conocidas consecuencias nefastas sobre la salud de los que fuman y de su entorno, sino que también tiene un impacto catastrófico en el medio ambiente por los ingredientes tóxicos en los residuos de cigarrillos, toneladas de humo cancerígeno y el uso de pesticidas.
En vísperas del Día Mundial contra el Tabaco, la Organización Mundial de Salud (OMS) presentó su último informe anual acerca del uso de este producto centrado en el grave impacto que tiene sobre el medio ambiente.
Por ello, puso en relieve este año lo que sucede después de que el cigarrillo ha sido consumido, dónde va a parar la colilla y cómo sus efectos funestos persisten incluso después de haber sido arrojada en una papelera o en la vía pública.
Sin embargo, no deja de resaltar que, pese a los esfuerzos internacionales por disminuir el consumo de tabaco, éste provoca millones de muertes cada año y genera gastos por miles de millones de dólares en el mismo periodo, por los costes en sanidad, pérdida de productividad y degradación medioambiental.
Conoce las cifras que este producto genera a nivel mundial.
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Afecta la vida humana
Aunque todos conocen que es una de las principales consecuencias del consumo del tabaco, resulta asombroso creer que cada año fallece este número de personas a causa del consumo de tabaco y cuesta a los hogares y gobiernos más de US$ 1,4 billones en gastos sanitarios y pérdida de productividad, según la OMS. El 63 % de las muertes en todo el mundo se atribuyen a enfermedades crónicas (el tabaquismo es uno de los principales factores de riesgo).
Además se multiplica el riesgo de perder los dientes en los fumadores. El tabaco interfiere en los procesos químicos que tienen lugar en la boca, contribuyendo a un exceso de sarro. Otro efecto negativo es que tiñe los dientes de amarillo y acelera el deterioro de la dentadura. Algunos estudios concluyen que fumar contribuye a la aparición de caries.
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Afecta el medio ambiente
Siete millones en total, es el número de químicos tóxicos que contienen los desechos del tabaco, los cuales envenenan no solo la atmósfera, sino los suelos, mares y los cursos de agua, de acuerdo con los especialistas. Estos químicos contenidos en el tabaco causan cáncer. Entre el 30% y 40% de los objetos recogidos en las actividades de limpieza costera y urbana representan las colillas de cigarro. Pero no sólo el desecho del cigarrillo se ha convertido en un dolor de cabeza para los servicios de limpieza municipales, sino también los plásticos y las cajetillas en los que se venden.
Otra forma de contaminación debido al tabaco son las emisiones de humo, que representan toneladas de gases cancerígenos, tóxicos y de efecto invernadero. El tabaco genera efectos perniciosos para el medio ambiente desde el cultivo de la hoja de tabaco, que requiere el uso de agroquímicos, reguladores de crecimiento y otras sustancias, y que contribuye a la deforestación, alerta la OMS.
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Afecta la economía de los países
En la actualidad los gastos totales ligados al tabaco que el mundo gasta en ayuda humanitaria o de emergencias son 10 veces mayores y representan 40 % más de lo que en 2012 gastaban los gobiernos de todo el mundo en educación. Además $53.6 dólares por persona al año es el gasto estimado de los gobiernos en términos sanitarios. De manera particular la economía de las familias también se ve afectada.
En la mayoría de casos el 10 % y hasta más es el gasto de muchos hogares en productos de tabaco, lo que significa menos dinero para comida, educación y atención médica.