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En La Granjita los habitantes afirman que no hay pandilleros. La Policía afirma que la zona es pandilla Mao Mao.
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En algunas colonias, ambas pandillas borran los grafitis de la otra para demostrar que ganan territorio.
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Hay mensajes para vendedores de droga y crack. Las pandillas controlan su venta y narcomenudeo.
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En colonias de San Jacinto y sur de San Salvador, la clica Harrison Locos Salvatruchos mantiene el control.
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En las comunidades muchos de los territorios de las pandillas están divididos por los ríos y quebradas.
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Los pandilleros se mantienen apostados vigilando su territorio, cerca de la Terminal de Occidente.
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La Avenida Alberto Masferrer en la colonia Escalón, sirve como el límite entre la Mara Salvatrucha y Mao Mao.
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En los barrios y colonias las pandilleros mantienen atemorizados a sus habitantes con mensajes de control.
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En la calle El Mirador la MS utiliza la zona como corredor para otras zonas.
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En las colonias de la parte alta de la ciudad de San Salvador, los territorios también están divididos.
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En la comunidad San Pablo de la colonia Escalón, la Mara Salvatrucha tiene el control del territorio.
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En la Iberia hay una división marcada entre las dos pandillas. Un pasaje suele ser escenario de múltiples balaceras.
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En la zona sur de San Salvador, ambas pandillas utilizan las montañas como corredores para huir de la Policía.
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En la colonia El Paraíso la policía realiza con frecuencia detenciones por extorsión y homicidio.
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La pandilla MS mantiene el control de la extorsión en un corredor de la 29 calle poniente.