Alianza sumó diez años sin ganarle a FAS en el Quiteño

Alianza llegaba como favorito al Quiteño, pero sigue sin poderle ganar ahí a FAS tras una década, que consiguió la victoria en el último suspiro

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Por César Najarro

2017-03-19 6:44:37

SANTA ANA. Los tigrillos del FAS recibieron en horas bajas al líder del torneo, Alianza. Pero los papeles parecieron invertirse en el Quiteño, a donde los locales dominaron por completo en el primer tiempo. Sólo les faltó el gol ante un rival que apenas les generó, y más por errores propios que por méritos de la visita.

El cuadro asociado utilizó un 4-2-3-1 en el que, a la hora de atacar, se quedaba con apenas tres hombres atrás, y poblaba la media cancha con seis, para dejar en punta a un solitario Rafael Burgos, que pivoteó muy bien, se asoció con Stradella, Morán y Castillo, y se dejó uno de sus mejores encuentros de la presente campaña.

Era otro este FAS, uno que controlaba los tiempos del juego, que casi no sufría atrás, que recuperaba rápido el balón y que ganaba los rebotes.

Pero le faltó algo, lo más importante, meter la “chimbomba” entre los postes que defendía Óscar Arroyo, también protagonista del 0-0 del primer tiempo.

Apenas sobre el 2?, ya anunciaba FAS que salía con todo, que eso de ser “noveno” en la tabla era una farsa, que en la cancha, cualquier cosa podía pasar y que iban a buscar el partido. Erivan Flores tuvo tiempo y espacio y mandó un centro al área, a donde Burgos le ganó a Ferreira por arriba, pero su cabezazo se fue desviado del pórtico paquidermo.

Poco después, con el dominio casi completo del encuentro, comenzó a probar FAS otras variantes más allá de los centros, el tiro de larga distancia. El primero fue Castillo, con un remate sobre el 11? que se fue apenas desviado.

Para ponerle drama al asunto, ya que Alianza no atacaba ni tejía jugadas, Cerritos se puso regalón y Zelaya interceptó un balón. Se iba sólo hacia meta, pero el arquero local Coloca, siempre presto a salir, corrió rápidamente para despejar y alejar el peligro.

La acción era un espejismo, y producto de un error de los locales, no por mérito de los visitantes, que volvieron a ser dominados. Para el 15?, fue Marroquín quien se animó de larga distancia, pero Arroyo comenzaba a vestirse de héroe al volar para tapar el bombazo y desviar a tiro de esquina.

Olía a gol en el Quiteño, y se animó también Morán de unos 35 metros, pero su tiro se fue apenas desviado.

No encontraba cómo cortar los hilos del rival Alianza, que marcaba con cuatro hombres a uno, a Burgos, y que perdía en la media, a donde quedaba en inferioridad numérica ante lo poblado del planteamiento tigrillo. Es que Emiliano Pedrozo mandó ahí toda la fuerza, para controlar los tiempos, para tener el balón, para probar de media y larga distancia y para abrir por las bandas cuando hubiese ocasión.

Se perdían en la marca Cerén y Juan Carlos Portillo, y el primero, figura de los paquidermos en partidos pasados, estaba con las luces apagadas, no veía una, perdía todos sus balones y sus duelos individuales, y ni su arma más efectiva, la velocidad, salía a relucir. Tampoco Sosa carburaba, y Fito era un aficionado más allá adelante.

Al 21?, un centro de Castillo lo pifió Silva, y llegó Burgos a dar un toque a dos metros de portería, pero desviado, cuando ya salía a taparle el ángulo Arroyo.

FAS continuaba con lo suyo, y no se caía en lo físico. Pero no encontraba la llave para abrir el cerrojo.

Sobre el 36?, fue Burgos el que probó con un potente remate dentro del área, tras una jugada colectiva, pero Arroyo usó la capa de héroe de nuevo, aunque soltó el balón. Le quedó a Castillo, pero el arquero se repuso y le tapó rápidamente.

Todo era de FAS, pero en los minutos finales del primer tiempo, casi se complica en un par de acciones, en las que Jiménez y Cerritos recurrieron a las faltas para bajar a Portillo (cambió de banda) y vieron la tarjeta amarilla.

Fue en los cobros a balón parado que llegó Alianza, pero no supo aprovecharlo. Y un nuevo error de FAS, en la cobertura de un tiro de esquina, tampoco surtió efecto. Silva no encontró forma para rematar el balón suelto y llegó el despeje de los tigrillos.

Otro juego

En el arranque del segundo tiempo, Alianza movió sus piezas. Salió Juan Carlos Portillo y entró Luis Hinestroza. Mientras que FAS se vio obligado a hacerlo, tras molestias del “polaco” Marroquín, quien salió para dar paso a Josué Santos.

La primera acción de peligro fue para los paquidermos, que parecían decididos a ser más protagonistas. En un tiro de esquina, realizaron una jugada preparada en la que Rivera prolongó la dirección del esférico, y apareció en solitario Isaac Portillo para rematar, pero le puso mucho “amor” y la mandó a la tribuna.

Y la siguiente acción también fue para la visita, sobre el 53?, cuando Sosa se animó de larga distancia, pero su potente tiro se fue desviado.
FAS, sin embargo, no estaba dispuesto a bajar los brazos y comenzó a llegar de nuevo, esta vez por banda izquierda, a donde Abarca perdía el duelo con Castillo.

Pero el partido ya era parejo, porque Alianza se acordó de jugar, aunque no era, aún así, el Alianza líder del torneo. Con dificultades, volvió a llegar al 66?, cuando Cerén habilitó a Hinestroza y este giró sobre su eje para sacar un remate ante la tibia marca de Jiménez, pero el meta Coloca estaba bien ubicado para quedarse con el balón.

Ya en el tramo final, armó una buena contra Alianza en la que Zelaya asistió a Hinestroza, quien puso el centro y cerró de cabeza Larín. La bola fue al fondo, pero el línea señaló una posición adelantada muy dudosa.

Y después, en un tiro libre, Darío Ferreira estuvo cerca de darle los tres puntos a la visita, pero el balón sólo pasó “besando” el travesaño.

Cerca estuvo también FAS a falta de cuatro minutos, cuando nadie de Alianza pudo rechazar un balón en un tiro de esquina y Julio Cerritos, sumado al ataque, improvisó un remate de volea, pero se fue apenas arriba de la portería.

El partido se acababa y en tiempo de descuento, Julio Amaya cobró un tiro libre en el que se regaló Arroyo, salió a nada, el balón quedó suelto y Néstor Renderos lo mandó al fondo para festejo de los tigrillos.