Switch y la Leyenda de Zelda llegan rompiendo esquemas

Nintendo lanzó ayer su nueva consola, Switch, su primer dispositivo doméstico en cinco años, con existencias ya agotadas en numerosos comercios en Japón. La meta es romper tendencias y revolucionar la forma de jugar con su propuesta mixta. 
Switch salió a la venta  en 53 países para ser una de las plataformas de referencia entre sus potentes competidores y dejar en el olvido el deficiente desempeño de su antecesora, la Wii U. 
Funciona como una consola doméstica cuando se conecta al televisor mediante una base (“dock”), pero también como portátil una vez se separa de ella, lo que da la posibilidad de continuar con el juego desde el mismo punto de forma inmediata y en cualquier sitio. 
Esta movilidad es la gran baza de Nintendo, “una característica que ninguna otra compañía ofrece ahora mismo” y un concepto con el que desde el punto de vista técnico “ha dado en el clavo”, según el consultor de la industria de los videojuegos Serkan Toto. 
De forma simultánea fue lanzada ayer la versión para Switch de “The Legend of Zelda: Breath of the Wild”. De acuerdo el sitio especializado Xataca.com, es un  juego que rompe con lo convencional y que llevará a sus usuarios a un viaje por praderas, bosques y cumbres montañosas para descubrir qué ha sido del asolado reino de Hyrule en esta maravillosa aventura.
Este videojuego es uno de los títulos más esperados desde el año pasado, el cual fue anunciado en un inicio para la Wii U, pero debido a los retrasos se decidió que también fuera el título de lanzamiento de la nueva consola. 
La historia del videojuego da comienzo con Link despertando de un sueño de 100 años. Desorientado y con la única ayuda de una voz que le guía en sus primeros pasos, el protagonista de esta historia empieza a ser consciente de que el mal reina en Hyrule y de que, tal y como ya intentó 100 años atrás con la ayuda de la princesa Zelda y de otros cuatro elegidos, deberá acabar con él.