La empresa textilera Rayones de El Salvador cumplió recientemente 54 años de operar y su presidente Antonio Safie asegura que una de las claves es apostar con fuerza y seguridad en el negocio.
“La guerra no nos detuvo, lejos de ello, ante la dificultad en el suministro de hilasa y gracias al apoyo del Banco Central de Reserva, se obtuvo un crédito para montar hilanderías de exportación con lo cual nos volvimos autosuficientes en materia de hilasa y nos convertimos en uno de los principales exportadores de El Salvador hacia mercados no tradicionales”, asegura.
Rayones inició con 35 empleados y a la fecha ya cuenta con 1,800 colaboradores, muchos de los cuales trabajan ahí desde que inició la textilera.
Safie dice que Rayones ha caminado un sendero difícil “con muchos tropiezos”, pero que ha salido adelante con determinación y deseos de generar más inversión y más empleos, ya que con ello ayudan a dinamizar la economía del país.
Exportaciones
Actualmente Rayones exporta hacia Estados Unidos, que es su mayor comprador, además de Centroamérica, El Caribe y Chile. Y aunque no detalló cuáles, Safie declaró que están buscando otros mercados, siempre con la idea de crecimiento y generación de empleos.
“Ha pasado ya más de medio siglo desde que fundamos Rayones de El Salvador. Cincuenta y cuatro años bajo diferentes tipos de gobiernos, y varias crisis económicas nacionales. Sin embargo como buenos salvadoreños no hemos dejado de invertir en la empresa, en el personal, ni en las demás empresas del grupo”, enfatizó Safie.
Se necesitan incentivos
“Cuando uno tiene una idea hay que aferrarse y tratar de desarrollarla cueste lo que cueste y empezar una empresa no es fácil, siempre hay muchos tropiezos, pero con la ayuda de Dios y que la banca apoye se puede desarrollar, pero debe haber incentivos”, aseveró el presidente de la textilera.
Safie recordó que en 1960 El Salvador logró industrializarse porque se aprobaron leyes para invertir.
Sin embargo lamenta que el gobierno actual no desarrolle una verdadera política o visión de impulso de proyección a la inversión.
El presidente de Rayones dijo que deberían haber beneficios para que la industria no sienta el impacto financiero así como que no se paguen impuestos por importación de maquinaria y de materias primas, para que el país sea atractivo para los inversionistas.
“El gobierno solo habla de poner más impuestos, el capital va donde lo quieren ayudar, pero hablar de más impuestos lo que hace es que los inversionistas se vayan a otro país. Todo esto lo que hace es encarecer las inversiones y por ende, encarecerle la vida al pueblo, porque subir el IVA a todos nos afecta. Y por el contrario, si hay más inversión habrá más fuentes de trabajo”, concluyó.