La Empresa Transmisora de El Salvador (ETESAL), una subsidiaria de la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) ha solicitado a la Fiscalía General de la República (FGR) que investigue irregularidades en la concesión de varios contratos a la empresa Power Systems S.A. de C.V. tras descubrir nexos entre esta y el exgerente general de esa empresa, José Ernesto Gálvez Orellana.
Los vínculos entre el exgerente Gálvez Orellana y la empresa Power Systems S.A. de C.V., permitieron que esta última se adjudicara $3.5 millones producto de 20 contratos entre 2006 y 2014, según documentos a los que tuvo acceso El Diario de Hoy.
Este medio logró determinar que entre uno de los socios de la empresa en mención existe parentesco con la hija del exgerente, y que durante ocho años obtuvo 20 contratos de ETESAL, subsidiaria que inició operaciones en 1999 y que da mantenimiento a la red de energía de alta tensión del país.
ETESAL, mediante una nota enviada a este periódico, confirmó esos nexos y que además de detectar esa “estructura” la desarticularon en 2015 luego de realizar una auditoría. Además informa que se adoptaron medidas de tipo jurídico, entre ellas varios avisos a la Fiscalía General para su investigación.
Pero además, Gálvez Orellana, quien ingresó a ETESAL en octubre de 1999, fue separado de su cargo en enero de 2015 como parte de medidas administrativas que tomaron las actuales autoridades de la empresa.
En la nota enviada a El Diario de Hoy, Roberto Trejo, presidente de ETESAL, dijo que esta estructura de contratos entre el exgerente general y la sociedad Power Systems “fue detectada y desarticulada en 2015” vía una auditoria interna que inició en julio de 2014, la cual incluía un inventario de los contratos ejecutados en la anterior gestión, que era encabezada por Sandra Beatríz Munguía, hija del actual ministro de Defensa, David Munguía Payés.
“Lo que se realizó como parte de las actividades de la nueva administración de ETESAL fue un inventario y una auditoria de los contratos ejecutados y en ejecución, esas irregularidades fueron detectadas en su momento porque llamó la atención el procedimiento y la adjudicación de esa cantidad de proyectos a la misma empresa”, dice Trejo en la nota.
El ejecutivo de ETESAL agregó en la nota que en la institución “tomaron las medidas adecuadas” para que no continuara dichas prácticas, lo cual implicó notificar a la FGR sobre el hallazgo.
“En muchos de los contratos lo que se hizo fue adoptar medidas de carácter jurídico, lo cual implicaba avisar a la Fiscalía, mientras que otros siguen en evaluación en nuestra empresa”, agregó Trejo.
El presidente de ETESAL enfatizó en que a la fecha no hay contratos en ejecución o vigentes con Power Systems, una empresa cuyo principal accionista es Jorge Omar Guerra Calderón, cuñado de Rebeca María Gálvez González, hija del exgerente.
Según registros a los que tuvo acceso este medio, los primeros contratos dados por ETESAL a Power Systems que aparecen datan de noviembre de 2006 cuando la subsdiaria de CEL era presidida de forma temporal por Gálvez Orellana. En ese año vendieron tres seccionadores tripolares (equipos de alta tensión) a un monto de $47,163.
Ya en el período de Munguía, quien llegó a la presidencia de ETESAL el 28 de junio de 2011 durante el gobierno de Mauricio Funes, Galvez Orellana mantuvo su cargo de gerente general y los contratos con Power Systems S.A. de C.V. continuaron.
El caso más representativo es el de un contrato por $651,550 firmado el 30 de septiembre de 2011 para el suministro de seis unidades remotas.
Para firmar todos los contratos por parte de Power Systems la junta general de accionistas de la empresa acordó el 17 de septiembre de 2009 dar poder al administrador único suplente.
Esto permitió a Guerra Calderón no figurar en ellos y evitar posibles conflictos de interés o investigaciones en el periodo en que se concedieron los contratos.
Se buscó personalmente a Gálvez Orellana a través de la empresa Power Systems antes de publicar estos reportajes pero no se logró entablar una vía de comunicación con él, ni tampoco a través del Instituto de Ingenieros en Electricidad y Electrónica (IEEE) IEEE, al cual pertenece.
Asesora al CNE
Tras su separación de ETESAL, Gálvez Orellana, un ingeniero eléctrico, se mantiene en el rubro energético, ya que fue juramentado, a mediados de diciembre pasado como miembro del comité consultivo del Consejo Nacional de Energía (CNE) por parte del ministro de Economía, Tharsis Salomón López.
El comité consultivo es una instancia que asesora al CNE en temas energéticos y de electricidad.
El exfuncionario pertenece a dicho comité consultivo para el período 2016-2019 en representación del Instituto de Ingenieros en Electricidad y Electrónica (IEEE) y su propuesta fue conocida por Luis Roberto Reyes Fabián, secretario ejecutivo del Consejo y actual miembro de la junta directiva de CEL.
“El comité es la instancia establecida en la Ley de Creación del CNE y participa del trabajo enmarcado en el avance de la Política Energética Nacional, trabaja en la propuesta y revisión de políticas, programas y acciones dentro del sector eléctrico para beneficio de la sociedad civil”, dice el Consejo en una nota informativa sobre la juramentación.
El exgerente general de ETESAL también pertenece al IEEE, una asociación global de ingenieros eléctricos que tiene una sección en el país y que apoya a profesionales y estudiantes del ramo.
Eso le permitió llegar al comité consultivo del CNE donde también participan la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), la Cámara de Comercio, universidades y hasta sindicatos del sector eléctrico.
En el CNE se explicó, a través de una nota solicitada por este periódico, que Gálvez Orellana fue propuesto por el IEEE para formar parte del comité, a través de su presidente, Armando Moisa y confirmó que López hizo la juramentación en noviembre de 2016.
Además confirmó que el exgerente de ETESAL participa de este comité “como una instancia de consulta” por lo que sus decisiones no son vinculantes. Por lo tanto “no recibe ninguna remuneración”, explicó el CNE.
“Gálvez no asesora al CNE, es solo un miembro del comité consultivo que es al final una instancia de consulta”, puntualizó la nota enviada a este periódico.