Las empresas hacen un aporte económico al país, pero también deben estar conscientes del impacto ambiental y social que causa en sus entornos, de tal manera que se pueda minimizar los efectos negativos y dar fortalezas las comunidades, fue la conclusión principal del conversatorio organizado por la Fundación Salvadoreña para la acción social (Fundemas).
En el conversatorio “El rol del sector privado, la RSE y sostenibilidad en el 2017: visión de agencias de cooperación internacional”, en el que participaron representantes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), embajada de Canadá y de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), se discutió el impacto y la contribución de la Responsabilidad Social en la actualidad.
Para la representante BID en el país, Carmina Moreno, es importante establecer alianzas entre el sector privado y los gobiernos, ya que estos últimos tienen la capacidad de establecer la normativa para la operación de las empresas y facilitar el desarrollo sostenible.
Para la ejecutiva, el sector privado puede dar más allá de lo que el marco regulatorio le mande, además de estar en consonancia con su medio ambiente y el entorno donde desarrolla sus operaciones.
“Hablar de la RSE no es un tema que se puso de moda, si no que genuinamente es un accionar que permite que este ecosistema funcione”, destacó Moreno.
El que genera riqueza y trabajo también debe generar sostenibilidad de su inversión a través de involucrar de las comunidades y el cuidado del medio ambiente, según la especialista.
Además es importante que las comunidades se apropien de los proyectos y estos perduren en el tiempo, generando un valor agregado para las personas y las empresas.
Mientras que Romeo Calderón, oficial comercial de la embajada de Canadá, en cuanto al cuidado del medio ambiente, mencionó que las empresas deben estar conscientes que los mismos edificios son de los mayores emisores de gases y de la cantidad de electricidad y agua que se necesita para mantenerlos.
Además destacó que la empresa privada podría hacer recomendaciones al gobierno para que haga un marco regulatorio en materia de sostenibilidad.
El Gobierno canadiense ha destinado $1,000 millones en proyectos que permitan disminuir la huella de carbono, con ideas forestales, nuevas tecnologías y energías renovables, entre otros.
La globalización también está influyendo en que las empresas adopten la RSE, porque hay países que exigen que las empresas exportadoras hagan labores de RSE.
Christopher Moore, gerente de Programas de Crecimiento de USAID, destacó que, a pesar de la inseguridad, los problemas de violencia y otros, los países siguen creciendo y que también en El Salvador “hay chispas de esperanza” y un ejemplo específico es el sector de turismo, que debería ser el de mayor impacto y que, sin embargo, está al alza.
Con lo antes mencionado el especialista afirmó que de ahí parte la importancia de hacer programas sostenibles en el tiempo.
Para Moore, cada persona tiene responsabilidad de cuidar del medio ambiente, por ejemplo, por el solo hecho de ser parte de la sociedad.