En un año de operaciones, la terminal marítima de recolección de gas líquido de Tropigas amplió su capacidad de distribución de 4 millones de galones a 12 millones, informaron este viernes voceros de la planta.
De esa cantidad que la terminal importa mensualmente, 6 millones de galones de gas se destinan para el consumo nacional, y los otros 6 millones se orientan hacia Guatemala, Honduras, Nicaragua y Belice.
Vea la galería de imágenes en este enlace
Esto le permitió a la empresa gasera mover sus actividades, relacionadas con el manejo y almacenamiento de gas, de Puerto Cortés en Honduras hacia la zona de Corsain en La Unión, El Salvador.
Estas declaraciones fueron vertidas durante una visita que la embajadora de Estados Unidos, Jean Elizabeth Manes, realizó a la terminal como un ejemplo de la cooperación entre ambas naciones, puesto que la compañía de comercialización de gas cuenta con inversionistas estadounidenses.
LE RECOMENDAMOS: Embajadora de EE.UU. lamenta que no haya acuerdo fiscal
La funcionaria detalló que obras como estas son claves para la economía nacional ya que la empresa gasera crea importantes fuentes de empleo, mejora el comercio y genera ingresos al puerto Corsain, además de impuestos municipales para el departamento de La Unión.
De acuerdo con un comunicado de prensa de Tropigas, la planta marítima de gas líquido de petróleo ha recibido 15 barcos de 10 millones de galones de gas, cada uno, desde su inauguración, hace un año.
Asimismo, se informó que la terminal de gas, ubicada en el Golfo de Fonseca, La Unión, ha generado en este año un comercio directo de $140 millones con Estados Unidos.
ADEMÁS: Subsidio al gas llega a menos familias
“Actualmente hay un contrato en el mediano plazo para levantar el producto de la terminal Buckeye, Corpus Christ, Texas, Costa del Golfo (USGC)”, se indicó.
La Terminal Marítima permite un mayor margen de seguridad de abastecimiento, ya que antes de la terminal marítima, el gas solo se importaba vía terrestre, lo que generaba retrasos por el cierre de fronteras o problemas en carreteras, lo que cambió ahora con esta terminal.
Hasta el 2015, más del 90 % del gas que se consumía en el país provenía vía terrestre de otros países de Centroamérica, y en casos de catástrofes naturales o problemas en las fronteras se corría el riesgo de no garantizar el adecuado suministro para abastecer la demanda, por lo que se optó por construir esta terminal.
El Grupo Tropigás posee operaciones en toda la región con diferentes marcas. Sólo en El Salvador cuenta con 12 plantas de llenado y comercialización, ubicadas a lo largo del país para garantizar el suministro.
La empresa genera actualmente 1,300 empleos directos y más de 5 mil indirectos con su red de distribución.
A mediados de enero de 2016, Tropigas anunció la inversión de 45 millones de dólares para la ampliación de su terminal marítima de gas, ubicada en Puerto Corsain. Acá se construyeron ocho nuevas esferas; con lo cual la terminal puede contener 12 millones de galones de gas propano, según explicó Marco Martínez, director general de Tropigas en El Salvador en esa ocasión.
Tropigas invierte $45 millones en ampliación de terminal de gas
Las proyecciones
Según el director general de Tropigas, si El Salvador no tuviera este intercambio comercial de gas con Estados Unidos el cilindro costara dos o tres veces más que el precio actual.
“Si este producto no lo pusiera Estados Unidos a la venta créanme que el cilindro que ocupan en sus casas para cocinar costara el doble, o el triple, costara unos $30”, enfatizó.
Respecto a las proyecciones de la compañía, Martínez dijo que la planta marítima se pensó para abastecer sin problemas para 10 años, así que en ese lapso no tienen contemplado una ampliación en El Salvador.
Respecto a la visita de la embajadora de Estados Unidos, Jean Manes a la planta, este martes 7, Martínez dijo que fue para constatar el funcionamiento de la terminal y conocer si había algún aspecto que potenciar para un mejor funcionamiento.
Limitantes en fronteras
El ejecutivo de la planta detalló también que una limitante constante que tiene la empresa son los retrasos en el paso de la frontera con Honduras, ya que una pipa ha llegado a tardar hasta 8 horas para pasar. “Hemos tenido problemas en los puentes con Guatemala por huelgas o retrasos, pero más con Honduras, pues por esa aduana pasa el gas también para Nicaragua y estamos siempre en contacto con la Dirección General de Aduanas para agilizar los trámites”, enfatizó Martínez.
El director general de Tropigas dijo que uno de los problemas es que las aduanas de El Salvador no trabajan 24/7, es decir 24 horas, los 7 días de la semana y eso les genera dificultades.
En ese sentido, dijo que espera reunirse con el nuevo director de Aduanas, para gestionar dicha problemática, y para solicitar que coloquen más personal para agilizar trámites.