El Juzgado Especializado de Instrucción “A” avaló el miércoles pasado que la Fiscalía se tome otros seis meses para continuar con las investigaciones en el caso conocido como operación Jaque.
El plazo de instrucción otorgado en la audiencia de imposición de medidas fue de seis meses y vencía en febrero.
A partir que las investigaciones no habían sido concluidas, el juzgado resolvió que se continuara con las mismas.
A finales de julio del año pasado, las autoridades policiales, tras indagaciones de la Fiscalía, realizaron capturas de supuestos pandilleros vinculados a la mara Salvatrucha (MS) en diferentes lugares de San Salvador, La Libertad y Sonsonate.
Para entonces fueron decomisados 25 autobuses, microbuses, automóviles, cabezales y furgones. Además fueron allanados lugares que, presuntamente, pertenecían a la pandilla.
Entre los detenidos estaban cabecillas de la MS, uno de ellos Marvyn Adaly Quintanilla Ramos, alias “Piwa”, señalado por las autoridades como el cerebro financiero de la MS a nivel nacional, y quien se hacía pasar por pastor evangélico.
La Fiscalía asegura que la operación Jaque significó un golpe a las finanzas de la pandilla, y las clicas afectadas tras las capturas fueron la Fulton Locos Salvatruchos, los Sancocos Locos Salvatruchos y Los Centrales Locos Salvatruchas.
La Policía, por su parte, informó que a la MS le habían sido congeladas 34 cuentas bancarias.
La audiencia de imposición de medidas fue realizada la primera semana de agosto del año pasado, en ella, el Juzgado impuso la detención preventiva para la mayoría de imputados.
En el documento de acusación presentado por la Fiscalía se establece que la MS tenía planes de atentar contra exfuncionarios y funcionarios, como el exfical general, Luis Martínez, y el actual presidente de la Asamblea Legislativa, Guillermo Gallegos.