Cada vez son más las personas que sufren esta enfermedad que años atrás se pensaba sólo atacaba a adultos mayores, ahora, individuos que apenas sobrepasan los 30 años son diagnosticadas con hipertensión.
Este padecimiento crónico se caracteriza por un incremento continuo de las cifras de la presión sanguínea en las arterias, y de acuerdo a la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE.UU., entre las causas que lo provocan están la cantidad de agua y sal que se tienen en el cuerpo, el estado de los riñones, el sistema nervioso o los vasos sanguíneos y los niveles hormonales.
9 alimentos comunes que eliminan la hinchazón rápidamente
¿Cómo saber si se es hipertenso? Contrario a lo que se cree, es muy difícil de detectar, ya que no se presenta ningún síntoma, cierto malestar puede llevar al enfermo a la clínica donde se le toma la presión y es acá cuando aparece fuera de lo normal.
En el momento que el paciente tiene conocimiento sobre su enfermedad, ya puede localizar algunas señales, como dolores de cabeza, náuseas o vómitos, confusión, cambios en la visión o sangrado nasal.
El médico recetará el medicamento indicado, la mayoría de veces es un tratamiento de por vida, además aconsejará un cambio en el estilo de vida del paciente.
Mira todo lo que el básquet le puede hacer a tu cuerpo
Además de ejercicio, una parte esencial para controlar la tensión alta es llevar una dieta baja en sal y grasas saturadas.
“Estudios demuestran que reducir la cantidad de sodio en la dieta reduce la presión arterial. La sal es necesaria en el organismo en pequeñas dosis, pero si se sobrepasa la cantidad adecuada se puede producir retención de líquidos y aumento de la presión arterial”, asegura la Fundación Española del Corazón.
Según los profesionales, entre los alimentos más dañinos están los “cubitos” de caldo, sopas comerciales, tocino de cerdo, pizzas, precocinados, algunos quesos, ketchup, embutidos, aceitunas, snaks y frutos secos, por mencionar sólo algunos.
Lo idóneo es ir al doctor para que recomiende un buen nutricionista que establecerá el tipo de dieta que el hipertenso debe llevar. Al inicio será un trabajo difícil, pero necesario para mejorar la calidad de vida.
Lo que sí debes comer
El primer objetivo a cumplir es bajar de peso, además de hacer ejercicio, es imperativo hacer dieta. El secreto está en las porciones y sustituir alimentos dañinos por saludables.
Los médicos recomiendan la dieta DASH, que tiene como meta disminuir la sal y aumentar el consumo de frutas, verduras y granos integrales. Carnes con poca grasa como pescado también entran al menú.
Un nutricionista es la persona indicada para que, a través de una entrevista, conozca los hábitos, tendencias alimenticias y el estado físico del paciente, de esta manera indicará los platillos adecuados. Una de las mayores desventajas de esta enfermedad es que no tiene cura, lo único que resta hacer es controlarla para llevar una mejor calidad de vida.
Algunos alimentos que no debes comer
Quesos
Entre más añejo este un queso posee más grasa saturada, colesterol y sodio, todos los ingredientes que perjudican la presión. Quesos semicurados y curados, salados y grasos, fundidos o para untar, no deben tener mayor espacio en tu dieta. Leche entera y requesón sin sal sí están permitidos.
Alcohol
La bebidas alcohólicas aumentan notoriamente la probabilidad de incrementar la presión arterial. Si bebes mucho no recibes los nutrientes necesarios que ayudan a controlar la presión. Ten mucha precaución.
Aguas minerales
Labocheck.blogspot.com comenta que en las dietas hiposódicas más restrictivas no se aconsejan las aguas con contenido mayor de 20 mg/l de sodio.
Sal
Este mineral es uno de los primeros elementos que se prohiben al momento de detectar una hipertensión. Estudios recientes aseguran que la sal interfiere con un mecanismo de seguridad natural del cerebro que impide que la presión arterial se eleve.