GUATEMALA. El exministro de Energía y Minas de Guatemala (2012-2015) Erick Archila, prófugo de la Justicia por supuestamente participar en una millonaria red de corrupción, está en Estados Unidos (EE.UU.), donde tiene abierto un proceso migratorio.
El Ministerio de Gobernación confirmó a través de las redes sociales que Archila, titular de la cartera durante el gobierno de Otto Pérez Molina (2012-2015) -en prisión preventiva por corrupción-, está “bajo fianza” en EE.UU. por un proceso judicial por “temas migratorios”.
Una fuente de la cartera dijo que por el momento se desconocen más detalles sobre este caso y que tampoco se sabe si el exfuncionario tiene prohibido o no salir del país, pero recordó que en su contra hay una orden de captura internacional.
Archila, que dimitió del cargo el 15 de mayo de 2015 alegando una persecución política -aunque ya en ese momento una comisión del Congreso lo investigaba por actos de corrupción- está acusado por la Fiscalía de Guatemala de sufragar lujosos regalos a través de comisiones ilegales a Pérez Molina y la ex vicepresidenta Roxana Baldetti.
Según la investigación, durante el mandato del Partido Patriota (PP) en Guatemala, sus dirigentes, Pérez Molina y Baldetti, recibieron obsequios sufragados por sus ministros a través de comisiones ilegales entre 2012 y 2014.
Pérez Molina, en prisión preventiva por otro caso de corrupción, recibió como regalo por su cumpleaños una lancha, una casa en la playa y un helicóptero valorados en 4.3 millones de dólares; mientras a Baldetti se le agasajó con una vivienda en Roatán (Honduras) por valor de $500,000.
Estos regalos eran costeados por los exministros del gabinete de Pérez Molina, quienes a menudo entregaban el dinero al entonces secretario privado de la ex vicepresidenta, Juan Carlos Monzón, hoy colaborador eficaz del Ministerio Público (MP-Fiscalía).
Por estos hechos ya están procesados los exministros de Defensa y Gobernación durante el mandato de Pérez Molina, Manuel López Ambrosio y Mauricio López Bonilla, y está con orden de captura internacional además de Archila el exresponsable de Comunicaciones Alejandro Sinibaldi.
A estos, más a los que ya están procesados por este caso, se les imputa los delitos de asociación ilícita y lavado de dinero, cohecho pasivo y fraude, entre otros.
Este caso está relacionado con una trama conocida como Cooptación del Estado, supuestamente liderada por Pérez Molina y Baldetti, y de la que ambos se sirvieron para financiar su campaña política y llegar al poder, y desde ahí dirigir los nombramientos del Estado de Guatemala.
La red criminal, en la que están involucradas grandes empresas, incluidos medios de comunicación y constructoras, además de más de 50 personas, financió de manera ilegal al Partido Patriota para su llegada al poder en 2012.
Una vez en el cargo, el exbinomio presidencial otorgó contratos ventajosos a estas empresas, así como a otras a las que exigió comisiones que alcanzaron unos $65.5 millones, de acuerdo con la investigación oficial.