No se trata nada más de llenarlos de clases extracurriculares sólo porque sí, sino de sembrar las semillas en suelo fértil. Nuestros hijos hacen las veces de esas semillas, pero no todos los suelos son aptos para todo tipo de fruto.
Muchos padres limitan a sus hijos únicamente porque no comparten la misma visión de lo que se quiere. Un niño a quien le gusta la danza debe enfrentarse a los prejuicios, empezando por los de su propia familia; lo mismo ocurre si desean ser estilistas, o si las niñas sueñan con ser boxeadoras o futbolistas.
Si papá y mamá no comparten ese entusiasmo lo más seguro es que los niños no se animen siquiera a intentarlo, al menos mientras son pequeños; el problema es que muchos de los talentos se pierden en el camino si no se estimulan desde edad temprana.
Pasos para descubrir el talento de tus hijos:
1. Valora su opinión y confía en ellos
Si los vas a inscribir en una clase extracurricular, primero que nada toma en cuenta sus deseos, no permitas que sean los prejuicios los que limiten las oportunidades de tus hijos, ellos tienen todo el derecho de participar en la elección de su futuro; confía en ellos y ellos confiarán en sí mismos.
2. Observa y sígueles la corriente
De esta forma descubrirás cuáles son los roles que tu hijo disfruta jugar en su tiempo libre; después, incorpórate a ellos. Cuando juegues con tus hijos permítete ponerte a su altura en vez de pretender que sea al revés.
3. Escoge los juegos y los juguetes
Existen muchos que les permiten interactuar, desarrollar su imaginación, resolver retos y aprender; procura que ésos sean los que tus hijos tengan a la mano.
4. No los obligues
Que los niños realicen actividades es maravilloso, pero que hagan cosas que no desean daña más de lo que ayuda.
5. Conviértete en su porrista
Es importante que aprendan a manejar la frustración y que descubran que los errores no son malos porque les permiten aprender; lo importante es no rendirse, tienen que creerse esto.