El gobierno amenaza

Haga la prueba, señor Ministro, y verá cómo le alcanzan los millones de dólares que recauda de nuestros impuestos, y recuerde, que amenazar con estatizar las pensiones, no cabe en un sistema democrático. 

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El paseo a la zona alta de Conchagua ofrece hermosos paisaje. El Golfo de Fonseca se ve impresionante desde l volcán conchaguense.

/ Foto Por Insy Mendoza

Por Teresa Guevara de López*

2017-01-14 4:53:00

El Ministro Cáceres ha actuado como un actor teatral manejando las finanzas públicas. Presentó el acostumbrado presupuesto desbalanceado, para aprobación exprés, esperando que ni siquiera leyeran los diputados, para componerlo después con más deuda. Como este año no se lo quisieron aprobar, cambió de rol: primero explicando, luego advirtiendo y finalmente amenazando. “O se aprueba el presupuesto, o se nacionalizan las pensiones”.
 
Y como la amenaza fue ratificada por Medardo, los ahorrantes debemos tomarlo en serio, tratando de entender la situación, para ponerle remedio. Expertos extranjeros han repetido en varias ocasiones que el sistema privado de pensiones AFP necesita reformas, pero nadie se atreve a decirlo claramente por miedo a perder votos. Por puro populismo, se asegura que no se va a aumentar la edad de jubilación, 55 años para las mujeres, cuando eso no existe ni en los países del primer mundo, con niveles de educación más altos, mejores salarios y mejores pensiones. Una mujer salvadoreña, a los 55 años, tiene todavía una enorme capacidad de trabajo, y al jubilarse, a veces sigue en su mismo empleo o se rebusca haciendo algo más productivo, aunque ya dejó de cotizar y la pensión que recibe no le alcanza. Si se aumentara en 10 años la edad de jubilación, cotizaría más tiempo y aumentaría su pensión.

El Ministro Cáceres ha insistido en que el monto de las pensiones del sistema privado es de hambre y menores que la pensión básica universal que el gobierno propone. Pero no dice que las AFP no pueden aumentar sus rendimientos, porque gracias a la movida de Saca y Funes, deben prestar al gobierno varios miles de millones, con un interés vergonzoso, para que este pague a los pensionados del sistema estatal, quebrado por mala administración.

Si el dinero de los ahorrantes pudiera colocarse con instituciones que pagaran intereses de mercado, entre el 7 y el 9 %, aumentaría el monto de las pensiones. Pero el GOES, tras haberse aprovechado por años de nuestros ahorros, nos dio el tiro de gracia cuando pagó con nuestros mismos ahorros, la deuda que tenía pendiente con las AFP, y no ha incluido el pago de esta deuda en el Presupuesto 2017, cuya aprobación está exigiendo, la cúpula entera del FMLN. Como último acto de su actuación, el Ministro insistió en la urgencia de que los diputados aprobaran el presupuesto, afirmando que la exigencia de la oposición de recortar gastos, era totalmente imposible, porque no había manera de hacerlo, terminando con una dramática frase digna de una obra de William Shakespeare: “Que me digan en qué se puede recortar”.

Señor Ministro, cualquier salvadoreño puede ayudarle, con una larga lista de gastos que puede recortar, como suspender todos los viajes y los seguros privados de los funcionarios públicos, destituir a todos los ministros que no han hecho nada de beneficio en las carteras que por compadrazgo les fueron asignadas; disminuir el millonario, y cada vez más creciente presupuesto de Casa Presidencial; no más compras de vehículos de lujo; quitar a los activistas que por miles siguen engrosando la burocracia; suprimir la seguridad a los funcionarios, para que vivan los riesgos que nos toca a quienes pagamos sus sueldos; las comilonas, las encerronas en hoteles, compras de obras de arte, fiestas y regalos; los subsidios inútiles y tantos otros gastos que son un despilfarro culpable, en la situación actual del país. 

Haga la prueba, y verá cómo le alcanzan los millones de dólares que recauda de nuestros impuestos, y recuerde, que amenazar con estatizar las pensiones, no cabe en un sistema democrático.

*Columnista de El Diario de Hoy.