Superintendente de Competencia: ???Nos preocupaba la creación de una situación de monopolio???

Proceso de venta de marcas Suprema y Regia Extra será monitoreado para asegurar que comprador tenga capacidad de rivalidad.

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El superintendente de Competencia, Francisco Díaz.

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2017-01-26 7:11:00

El superintendente de Competencia, Francisco Díaz, destacó esta mañana que con el objetivo de preservar la dinámica competitiva del mercado de cervezas en El Salvador y evitar un monopolio del sector, el Consejo Directivo decidió condicionar la concentración económica entre AB InBev y SABMiller.

“Nos preocupaba la creación de una situación de monopolio. Si queríamos trabajar de alguna manera en el mercado salvadoreño teníamos que concentrarnos en las marcas donde está concentrado el mercado”, dijo Díaz durante la entrevista matutina Frente a Frente.

Según el funcionario, la fusión de ambas compañías concentra el 30 % del mercado mundial y el 95 % del mercado salvadoreño, por lo que la SC señaló condicionamientos a la operación en el país orientados a facilitar la entrada y desarrollo de un tercer agente capaz de ser rival.


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La SC aprobó la propuesta de desinversión presentada por AB InBev consistente en la venta de las marcas Suprema, en sus tres variedades, y Regia Extra.

Los principales condicionamientos impuestos por la entidad fueron presentar un Plan de Desinversión para aprobación del CDSC; formalizar las relaciones con sus proveedores y abstenerse de cometer prácticas anticompetitivas, y mantener las garantías laborales de sus empleados.

Díaz detalló que además se impusieron otras “condiciones conductuales” como abtenerse de realizar sobre cualqueir tipo de práctica anticompetitiva, formalizar las relaciones comerciales con distribuidores minoristas y proveedores; y divulgar información sobre el mantenimiento de garantías laborales, condiciones de acceso a la red de distribución y cambios de propiedad sobre activos.

El plazo para que se produzca la desinversión es de 180 días hábiles.

Así, en aras de asegurarse que el tercero tenga capacidad de rivalidad y no se afecte el mercado, se establecieron compromisos para la desinversión.

El superintendente explicó que uno de ellos es mantener las mismas condiciones que han tenido las dos marcas de cerveza en cuanto a calidad, cantidad de producción, precio, distribución, envasado, entre otros. También se autorizó darle seguimiento a la operación de venta a través de una empresa de monitoreo.

“Esta empresa que va a hacer el monitoreo se selecciona de una terna propuesta por el oferente (AB InBev). Se tratan de empresas internacionales que tienen experticia”, dijo el representante sin dar mayores detalles.

Sobre el posible comprador de las marcas de cerveza, Díaz dijo que más que gran cantidad, “algunos interesados interesantes” se han acercado a la SC preguntar sobre el procedimiento.


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Por otra parte, sobre la venta de CocaCola, el representante explicó que era una operación distinta, sin ninguna participación de la SC.

“Lo de Cocacola es diferente no porque no forma parte de la operación mundial, Si no porque en El Salvador la estructura, la composición accionaria era diferente”, puntualizó.

A inicios de enero, el Consejo Directivo de la Superintendencia de Competencia (CDSC) informó que condicionó la solicitud de autorización de concentración económica entre Anheuser-Busch InBev SA/NV (AB InBev) –adquiriente– y SABMiller plc (SABMiller) –adquirido–.