Julio Baltazar Cerros, el hijo de Tenancingo que fotografió la guerra de El Salvador

Durante los 12 años de guerra, Cerros documentó las atrocidades que ocurrieron en distintos lugares del país, en particular de su pueblo, Tenancingo, departamento de Cuscatlán.

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Un hombre carga a su hijo herido durante la ofensiva de 1989, en Soyapango. Foto/ Julio Cerros / Foto Por Julio Cerros

Por Mauro Arias/ Carolina Amaya

2017-01-28 8:00:00

“Eran las siete de la mañana cuando empecé a hacer mis primeros fotogramas”, así inicia José Baltazar Cerros su relato sobre la cobertura que hizo durante la ocupación de Tenancingo el 25 y 26 de septiembre de 1983.

El “Chele Baltazar” como le dicen sus colegas es un reconocido fotoperiodista de la guerra de El Salvador, quien dedicó 12 años a documentar las atrocidades que ocurrieron en varios lugares del país y en particular en su pueblo natal, Tenancingo en Cuscatlán.


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“En ese tiempo hacia falta gente con espíritu de trabajo y con las agallas bien puestas para entrar a donde había que hacer fotografías periodísticas”, explica aun enérgico Cerros.

En 1979, antes de incursionar en el fotoperiodismo trabajó como laboratorista en Diario El Mundo. Sus jefes Cristóbal Iglesias y Rodolfo Vásquez lo incitaron a agarrar la cámara para documentar la guerra. “El trabajo que se realizó fue porque yo creí que un día iba a ser importante tener esta historia de la guerra”, explica.

Su colección fotográfica incluye la ofensiva de 1989, las tomas Tenancingo, la primera imagen en medios de comunicación de los misiles “Sam-7”. El fotoperiodista recuerda que cuando salió publicada la foto del proyectil lo enviaron a traer de la embajada de Estados Unidos para saber qué información tenía.

Cerros logró mezclarse entre los guerrilleros para desarrollar su trabajo “tenía un acercamiento afín con la fuerza beligerante. Así entraba a Guazapa, a Perquín; así entraba a todas las zonas de combate y puedo asegurar que conocí todos los frentes de guerra. Me filtraba a hacer mi trabajo y me iba, así pasaba hasta 15 días conviviendo con ellos”, relata orgulloso. 

Al finalizar la guerra Cerros ya trabajaba para Diario Latino ahora CoLatino, se metió al sindicato, sin embargo él y otros 84 empleados más fueron despedidos del periódico. 

En la actualidad se desarrolla como jefe de la Unidad Medioambiental de la Alcaldía de Tenancingo, sin embargo siempre anda una cámara fotográfica para atrapar su realidad.