Apuntes sobre la Selecta en la época post Maradiaga

Una columna de opinión de Gustavo Flores, editor de EDH Deportes

descripción de la imagen

El jugador Richard Menjivar de El Salvador se dirige a los camerinos luego de ser expulsado ante Panamá.

/ Foto Por EFE/Arturo Wong

Por Gustavo Flores | Twitter: @Gusflores21

2017-01-23 5:21:00

Nada nuevo bajo el sol de la Selecta. Una Copa Centroamericana que pasó sin pena ni gloria, un tercer puesto, una clasificación complicada a Copa Oro, las victorias sobre Belice y Nicaragua, desconcentraciones varias, el dominio ante otros rivales… Y claro, la falta de gol, mal endémico de este equipo, esté convocado cualquier delantero.

Esta Copa dejaba varias incógnitas que fueron despejadas en los 5 partidos. Como se amoldarían los jugadores a un entrenador nuevo como Eduardo Lara, como pesaría la racha histórica de partidos sin triunfos, como afectaría la poca preparación. Desde ese lugar, fue positivo.

Dejando de lado los resultados, la Selecta tuvo un rendimiento de mayor a menor en la Copa. Cuando se decidió a jugar con dos delanteros, Zelaya y Bonilla, se vio mejor en el juego y más agresivo en ataque. Fue el caso de los partidos ante los equipos alternativos de Costa Rica y Honduras y frente a Belice (3 goles en 22’).

Lara decidió dejar solo a Fito arriba por la sequía de Bonilla, pero no resultó ante Panamá ni Nicaragua. Ni cuando el equipo estuvo completo, ni cuando estuvo con 10 hombres. Esos fueron sus peores rendimientos en cuanto a volumen de juego. 

El balance negativo, se da sin dudas, en cuanto a conducta. Lara deberá trabajar y mucho en ese aspecto. Tres expulsiones (Zelaya, Larín, Menjívar), que por otro lado fueron las únicas tres del torneo, dejaron en rojo a El Salvador. Tres tarjetas rojas infantiles, innecesarias, en la mitad de la cancha… pero decisivas en cuanto a los resultados. Nunca pudo aguantar un resultado con 10 hombres. 

La discusión larga y polémica sobre la llegada de Fito o no a la Selecta, terminó como varios suponíamos. Lejos de su mejor nivel futbolístico, no fue el jugador desequilibrante que vaticinaban muchos. Definió bien ante Honduras pero también perdió chances claras, igual que Bonilla. Ambos delanteros quedaron en deuda. No era necesaria tanta polémica.

Entre los puntos altos del equipo se puede destacar a Roberto Domínguez, premiado como el mejor jugador joven, los primeros partidos de Gerson Mayén, los efectivos ingresos de Juan Barahona, la dupla que forman en la mitad de la cancha Darwin y Menjívar. Y las corridas de Oscar Cerén por derecha, a veces algo apurado a la hora de definir. Habrá que trabajar, y bastante, para que la época post Maradiaga siga sacando del pozo a la Selecta.