SANTA TECLA. FAS no consiguió regresar a la punta. Esa en la que ahora solo se quedó Águila. Los tigrillos no encontraron el gol, frente a un Dragón que sacó un punto de oro (0-0) en casa en otro campo, y ya se aleja en dos de la UES.
El cuadro santaneco se apuntó 30 puntos, al igual que los albos pero con menos goles, pero con un partido pendiente frente a Chalatenango (jornada 18). Los escupefuegos se quedan con 13, luego de una faena donde consiguió frenar al tigre y jugarle de igual a igual.
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Dragón actuó, en esta ocasión, como local en Santa Tecla. Jugar en Las Delicias, a pesar de ser pasto artificial, facilitó que los tigrillos no tuvieran que viajar hasta el oriente del país, donde en Santa Rosa de Lima por lo general los mitológicos han actuado como en casa. Pero para ninguno de las dos escuadras el campo era familiar, por lo que no existía ventaja para nadie.
Pero tampoco lo era que ambos técnicos se plantaron con esquemas iguales. Un 4-4-2 por el que la apuesta tigrilla era encarar por los laterales, sobre todo el derecho con Fernando Castillo; mientras los migueleños, con dos contenciones, también buscaban la opción de abrir espacio por los costados, donde Kevin Melara tenía un duelo directo con Castillo.
FAS tomó rápido la batuta del juego, y comenzó a dominar y a realizar su juego. Pausas, cambios de orientación, ritmo, salida. Mucho juego de mediocampo, donde ahora aparecía Facundo Simioli a la par de Jorge Morán. Pero pocas llegadas al arco, sin peligro ya que, además, la última línea de Dragón estaba aplicada.
Los mitológicos también permanecieron con mucha rotación del carril, cambiando banda Kevin Martínez con Melara, en ciertas situaciones. Esto dejó que algunos balones largos buscando a Kenroy Howell, en el frente, pero sin oportunidades concretas aunque permitiendo llegadas con pelota quieta.
Dragón, además, estaba jugando con muchas más “ganas” y fortaleza física, lo que por fin le permitió comenzar a tener llegada y presionar a los santanecos. Ya el juego en la media había cambiado y FAS empezaba a estar incómodo por cómo lo estaba enfrentando Dragón. Las oportunidades de los occidentales se redujeron en ataque, contando con las anticipaciones de hombres como Luis Hernández y Raúl González, en el fondo.
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Los tigrillos denotaron ansiedad al no tener el control del balón y al no volver a generar salida cómoda, mientras Dragón aguantaba con paciencia e intentaba crear. De esas, tuvo una Howell luego de un tiro libre de Melara, que el atacante intentó cruzarla frente a puerta y la envió cerca de la base del poste derecho de Luis Contreras.
El partido que había cambiado la dinámica, lo que no conseguía era el gol. La “Turba Roja”, que asistió en buen número, no dejaba de hacer sonar los instrumentos aplaudiendo las que FAS defendía, en un tramo donde Dragón no se cansaba de las contras. Y al mismo tiempo en que Nelson Ancheta y Osvaldo Escudero, los técnicos de cada equipo, entraban en juego de palabras.
Dragón, controlando a los santanecos, se fue al descanso con más oportunidades en tiros libres y de esquina. Y FAS se defendió bien. Pero al instante de abandonar la cancha, se fueron con intercambio de palabras Simioli con Axer López, y también se sumaron Óscar Portillo y Marcelo Tejeda. Incluso Ancheta reclamó al central Elmer Bonilla.
Sin llave para el gol
La pierna fuerte comenzó a ser protagonista. Esto puso algunas pausas, a un partido enredado en la media, en el que el cero definía mucho las marcas que habían impuesto los orientales, y algo de chispa que echaban de menos los dirigidos por Escudero.
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FAS cayó en entregas malas, balones perdidos, y desconcentraciones en la recepción de los mismos. No hubo destellos brillantes en el partido en el primer cuarto del complemento. Los movimientos fasistas y mitológicos empezaron a llegar. La idea siempre apuntaba a buscar el gol, aunque ambos cerrojos estaban bien aplicados. Sin embargo, el ingreso de Jairo Henríquez cambió el rostro tigrillo.
FAS tuvo un leve despertar, pero aunque estuvo cerca con su peligro no fue la mejor noche para la contundencia. Ni Eduardo Merino, Guillermo Stradella o Simioli, que gozaron con ocasiones a puerta, estuvieron finos. Fue Stradella el que la tuvo en el tramo final, pero sin ángulo a marco lo mandó afuera.
El cero se convirtió en el protagonista de un FAS que perdió la ocasión de volver a ser líder, y de un Dragón que resolvió un partido con carácter y que lo hace respirar en el fondo de la tabla.