Al ser consultado sobre la conveniencia de que se contrate un entrenador nacional o extranjero para la Selección Nacional Mayor, el ex jugador uruguayo José Mario Figueroa Vizcarret, radicado en el país desde hace muchos años, si bien se abstuvo de emitir una opinión contundente, lanzó algunas reflexiones de lo que se necesita hacer para cambiar el rostro y resultados de este fútbol.
“Pienso que es importante traer un buen técnico, pero lo es más aún, que de una vez por todas se pueda cambiar todo lo negativo que se está viviendo en el fútbol salvadoreño, creo que es un momento clave para hacerlo porque otras selecciones han avanzado bastante y si en este momento acá no se hacen cambios drásticos, las esperanzas de clasificar a otro mundial se volverán más lejanas”, manifestó.
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Agregó que es el momento de reflexionar y de cambiar, pero que lastimosamente en esto hay intereses creados y evitan que el cambio suceda. “Lo digo con propiedad porque conozco el medio, tengo la experiencia y que tengo derecho a decirlo. El fútbol salvadoreño requiere ahora de medidas extremas“, aseguró el ex delantero de Atlético Marte, Saprissa de Costa Rica y Olimpia de Honduras.
Enumeró que es necesario cerrar fronteras y trabajar internamente como lo han hecho otros países como es el caso de Chile y Colombia que de repente por sanciones han tenido que recurrir a esto, pero que en el fondo les ha dado buenos resultados.
“Es cierto, es importante traer un técnico que conozca el medio, que venga a sumar, pero se debe estar claros en que ese entrenador no resolverá o cambiará por si solo, los malos resultados del fútbol nacional, como lo dijo hoy el maestro Hernán Carrasco, acá se necesita crear divisiones inferiores, que los dirigentes se sientan comprometidos con el desarrollo del fútbol y que no solo busquen figurar”.
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Explicó que él, actualmente está alejado del fútbol porque no comparto en nada, lo que se está haciendo en cuanto al manejo del fútbol salvadoreño que merece mucho más y sobre todo la afición, que considera una de la mejores en el mundo, porque pese a estar recibiendo solo malos resultados, siempre están ahí fieles y al pie del cañón.
“Los aficionados son los que merecen respeto, por ellos vale la pena promover y luchar por un cambio de calidad en cuanto al manejo del fútbol”, afirmó.