CHALATENANGO. Un gol más. Y con eso, la cuenta subió a 13. Ante Chalate, Jefferson Viveros convirtió el último tanto con el que se convirtió, el sábado, en el campeón de goleo del Apertura 2016. Ese que, de paso, le abrió la clasificación al equipo a cuartos y a la victoria.
A diferencia de los 15 con los que Bladimir Díaz, su compatriota, ganó el del Clausura 2016, Viveros se quedó con dos menos, pero terminó satiafecho. Incluso, en la pasada jornada, erró un penalti que lo pudo ayudar, pero él cerró esta fase regular agradecido con el equipo.
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“Gracias a Dios se me da el título de campeón goleador, uno como delantero trabaja para ello, pero esto es trabajo del equipo. Agradecerle a los compañeros que estuvieron siempre a disposición de crearme opciones a gol, las logro anotar y bueno este es un triunfo grupal, más que individual”, declaró.
Sobre si era un objetivo ser líder de goleo hasta el final o si se dio en el camino, se sinceró: “Desde el comienzo, empecé a anotar goles. Tuve partidos donde no anoté, y cuando me destapé con un triplete (fecha 19 a Pasaquina) tomé el mando y gracias a Dios, de ahí para allá, no lo solté y ahora lo ratifico”.
Viveros continuó explicando con alegría que “con esos goles se lograron triunfos y empates complicados de visita, y eso le da felicidad a uno, poderle aportar al grupo que para eso es que uno viene acá, y esto es para la afición que siempre creyó en nosotros, para nosotros mismos que nos ha tocado pasar cosas muy difíciles, y ahora vamos a pensar en el partido con Alianza”.
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El atacante alcanza su primer goleo individual en Primera en el país, pero es el tercero de su carrera, luego del que consiguiera también uno con Limeño en Segunda y otro con Río Abajo, de Primera en Panamá. ¿Qué significa para él este triunfo?, lo resumió: “Para mí, es algo muy importante. Llegar a otra Liga, donde tienes que marcar la diferencia, hay muy buenos delanteros y ahora lo ratifiqué, y agradecido con Dios nuevamente y ahora a cerrar el capítulo para pensar en los cuartos de final”.
El 9 de los unionenses habló de la clasificación: “En casa (fecha 21), con el empate se nos fue la posibilidad de haber asegurado el boleto, lo aseguramos ahora y felices por el triunfo. Gracias a Dios por el triunfo, en lo individual porque se me da ser campeón goleador, pero repito es un trabajo del equipo que estuvo ahí conmigo, que creyó en mí, y qué lindo es responderle con ello”.
Viveros también externó que ha sido clave para que el equipo llegara a cuartos, tras la salida del DT Mauricio Alfaro: “Trabajar a la orden de lo que nos diga el profe (Francisco Robles), un equipo que tiene confianza, ganas, garra, y corazón y eso lo demostramos sea jugando de local o visitante y aquí lo estamos reflejando el día de hoy”.
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Y expresó una realidad clara para el conjunto santarroseño: “Y bueno, feliz. Feliz porque el equipo era benjamín, muy pocos creyeron en nosotros, Dios nos llevó de su mano, y ahora estamos ahí, metidos en la fiesta grande, y de aquí para allá solo son finales”.
Jefferson reiteró lo importante que es obtener este cetro en Liga Mayor y que Limeño le diera esa oportunidad: “Es lindo quedar en la historia de una institución, y en lo personal es lindo anotar y más cuando te dan reconocimientos como estos. Fueron goles claves para ganar partidos, más que el gol (el mejor) es la importancia”.