CHALATENANGO. El cuerpo técnico y el plantel de Chalate no finalizó la temporada regular como lo esperaba. Quería hacerlo, en lo futbolístico, con una victoria. Pero caso contrario, cerraron una campaña negra, que no solo recayó en perder con Limeño (1-2) y en no clasificar a cuartos de final, sino en el tema de la deuda salarial y los problemas administrativos.
El técnico Giovanny Portillo tocó el tema: “Lo cerramos de la peor manera. No logramos sacar tres puntos, y el torneo en sí ha sido difícil, no ha permitido estar establemente al grupo, me refiero a los jugadores. Queríamos cerrar con una victoria, no lo logramos, a pesar de que hicimos un buen partido, pero no pudimos concretar las que tuvimos y esperar a ver qué pasa”.
Y sobre eso mismo, qué sigue pasando, declaró: “La deuda es todo el mes de noviembre y de octubre se debe el 80%, entonces es una deuda grande para los jugadores. Se acercó esta semana Francisco Peraza pidiendo tranquilidad al grupo, de que al fin y al cabo, antes de iniciar el otro torneo se iba a cancelar, pero no sabemos cuándo”.
Así perdió Chalatenango ante el Municipal Limeño
Una situación incómoda y compleja para todos los norteños, que han devengado el salario: “Sí, realmente es complicado, porque los muchachos tienen familia, la mayoría depende de esto y estar con esa incertidumbre de cuándo va a llegar el salario de un trabajo que ellos ya realizaron, cuando el equipo terminó dignamente y poniendo la cara, no regaládole nada a nadie, con partidos disputados. Pero hay que esperar a ver qué pasa y cuándo se soluciona esto y ojalá sea lo más pronto posible”.
Portillo, que explicó que todavía tiene contrato por seis meses, dijo no saber si va a continuar o no, como los jugadores, “o quién va a agarrar el equipo que es lo principal, no se sabe quién se va a hacer cargo y de no haber solución pronta, primero Dios se abran puertas en otras instituciones”.
Portillo sí dejó claro que “administrativamente, se tendría que mejorar, no solo en lo económico, sino en muchas cosas como logística, personas que estén más cerca del grupo, ojalá si tienen esa visión o la persona que venga lo haga, porque hay que cambiar toda las situaciones que ha venido viviendo Chalate cada torneo. Es cada inicio de torneo en que se han dado los mismos problemas de no saber qué es lo que va a pasar con el equipo”.
Chalatenango también hace cuentas en la lucha por no descender
El jugador Óscar Rodríguez externó un poco lo que esperan, por el bien de Chalate: “Que venga una nueva directiva que cambie todo, alguien que haga llegar a la gente, que arme un buen grupo y que trabaje bien, sea ordena y haga un buen torneo. Lógico, es lo principal (lo salarial), y si mantiene bien a los jugadores pues se va a responder, y ojalá todo cambie”.
“Afecta bastante (la deuda) moralmente, dentro de la cancha. Uno debe ser profesional en ese aspecto, pero trae muchos conflictos, dudas y eso llena de incertidumbres”, añadió.