Al final del partido, los que terminaron celebrando fueron los santarroseños y los tigrillos bajo mucha frustración, resignarse a un punto, después de haber estado en ventaja en el marcador.
El cuerpo técnico de FAS no quiso dar declaraciones. El entrenador Osvaldo Escudero se quedó sentado en el baquillo, junto a sus otros asistentes, con caras de muy pocos amigos. Mientras el resto del plantel hacía ejercicio de estiramiento y comentaba lo que había sucedido.
“No se si pudo haber sido el cansación nos terminó afectando para no haber mantenido la ventaja, aunque si terminó jungando en contra. No se vía de que otra forma nos pudieran hacer gol si no era de penal. Es un punto con sabor amargo, porque tuvimos hasta para hacer el tercero y no la metimos”, expresó Guillermo Stradella, delantero tigrillo.
A pesar de la tristeza, el argentino destacó la actitud del equipo: “Ahora, de nada sirve hacer un analisis en caliente. Lo que si vale destacar es el sacrificio del equipo, quien se mató los noventa minutos. Dejo todo en la cancha. Lastimosamente, no se nos da la victoria y la dejamos pasar”.
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Por su parte, Fito Menéndez, portero de los santanecos, comentó que se vieron un poco perjudicados por el desempeño del árbitro Jaime Carpio.
“Es un punto amargo, porque se jugó bien, pero no nos alcanzó para quedarnos con los tres puntos. Habrá que mejorar en la concentración, porque errores nuestros nos terminaron afectando, sin restarle méritos al árbitro que se comportó muy rigorista sancionando esas faltas, especialmente la del primer gol”, apuntó “Fito Jr.”, quien junto al resto del equipo ya piensan en Metapán, su próximo rival.
Mientras tanto, los santarroseños, con una oración, agradecieron haber salvado por lo menos el punto. Aunque son conscientes de que todavía no pueden ganar en condición de local en este torneo.
“Quizá ellos creían que ya tenían el partido manejado, ya ganado. Pero ahí fue donde nosotros sacamos la jerarquía, hicimos respetar la casa. No se ganó, pero no se perdió, lo que es algo importante. Es un empate, a la larga merecido”, dijo el colombiano Jefferson Viveros, anotador de los dos tantos cucheros, a su ex equipo.
“Me siento satisfecho de haber anotado, tenía mucho tiempo de no hacerlo y eso genera una satisfacción. Pero esto no queda aquí, hay que seguir trabajando, porque esto sigue y vienen otros partidos duros”, agregó Viveros.
Clayvin Zúniga, quien llegó de cambio, después de un mes de inactividad; sumó diciendo: “Desde el inicio comenzamos a proponer, tuvimos opciones muy claras. Pero quedamos cuesta arriba. La actitud valió para terminar sacando un importante resultado, después de como se habían dado las cosas”.
Limeño ahora sacara sus conclusiones, ya pensando en el partido del miércoles, donde esparan sumar a Del Giorno, por sanción, y Toscanini, de lesión.