Águila se está volviendo “Fagundez-dependiente”. El charrúa está pasando por su mejor momento con los emplumados y son estos quienes se están viendo eneficiados, no solo por la dinámica que le da al equipo, sino porque también se ha convertido en el referente del gol migueleño. Ayer, uno fue necesario para que Águila terminara derrotando (1-0) a Limeño.
Duelo familiar, duelo entre vecinos, un “derby oriental” que tenía como sede el estadio Cuscatlán, en la capital, donde ambos equipos fueron visitante. En las gradas, las aficiones compartieron la tribuna familiar y eso presagiaba que sería un partido cómodo en cuestión de seguridad. Todo lo demás quedaba para lo que sucediera en la cancha.
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Obviamente, los migueleños fueron mayoría en el estadio, pero sin llenar ninguno de los sectores habilitados, ni incluyendo el espacio asignado con una promoción, de uno de los patrocinadores del equipo. Por los cucheros, un pequeño grupo representó a la “Furia Limeña”, haciéndose sentir con sus instrumentos.
Del partido, tanto Águila, como Limeño se reencontraban, cuando ambos pasan por un buen momento en el torneo, mismo que también los ha hecho escalar en la tabla de posición, es por ello que también se consideraba como un duelo directo por llegar a estar entre los primeros cuatro, dentro de la zona de clasificación.
Pero la cancha se prestó más para el juego de los emplumados, quienes parecen estarse acomodando al césped del “Monumental”, el que ha sido su casa en esta competencia, por los trabajos de remodelación en el Barraza.
Águila presentó tres variantes para este partido, en comparación al partido que jugaron entre semana ante los albos: Benji Villalobos, Álvaro Lizama e Isidro Gutiérrez. A pesar de estas rotaciones, Edgardo Malvestitti mantuvo el mismo esquema, con el 4-4-1-1.
La idea ofensiva de los migueleños era también la misma, tener control de la pelota, liderato por el uruguayo Nicolás Fagúndez, en quien pasó casi todos los balones, cuando los migueleños decidían irse en ataque.
Fueron más constantes sobre la portería de los santarroseños, quienes a pesar de verse dominados, mantuvieron orden defensivo y contraatacando poco, pero peligroso, como un disparo de Diego Coca, que pasó a un lado de la portería, por pocos centímetros (23’).
Eran situaciones con las que Limeño se soltaba la presión de los emplumados y emocionaban a las dos aficiones, para considerar un partido parejo.
Los técnicos Malvestitti y Alfaro actuaban de manera similar, manteniéndose al borde de su área, manteniendo una constante comunicación con sus jugadores y también el descontento por el trabajo arbitral del central, Elmer Martínez.
Centros intrascendentes y disparos desviados fue lo que Águila terminó generando en la primera parte. Mientras Limeño sumó una jugada clara a gol más, con tres episodios, donde Benji Villalobos fue protagonista: tiro libre de Valladarares, que el portero aguilucho rechazó, Alfaro remató, Villalobos, mandó a tiro de esquina. De ahí vino un centro pasado, que Enner Orellana cabeceó y de la línea, Villalobos rechazó (39’).
El cero a cero dejaba un sabor amargo entre los aficionados, al termino del primer tiempo, porque consideraban que uno de los dos merecía estar ganando: Águila, por el dominio, y Limeño, por haber generado las mejores ocasiones.
Estocada letal
No hubo cambios para el segundo tiempo y eso tampoco hizo modificar la tónica del partido. La diferencia la volvió a hacer el uruguayo Nicolás Fagúndez, con otro golazo de tiro libre.
Una falta sobre el “Turu” Flores, al borde del área grande, Fagúndez lo convirtió en el primer tanto emplumado, con un cobro sobre la barrera, que dejo parado al portero Lucha (50’).
Casi de inmediato, el técnico cuchero mandó a adelantar líneas en Limeño, con la llegada de Jesús Toscanini para tener más alternativas en el ataque, que ya no fue el mismo de la primera parte. Sin embargo, el uruguayo, quien ha pasado mucho tiempo lesionado, recayó de la molestia en el tobillo y ya no pudo seguir, dejando a los cucheros con uno menos, desde el 75’.
Limeño perdió fuerza, aunque luchó hasta el final para conseguir el empate. Águila encimó en varias ocasiones en busca del segundo, pero en la última instancia ya no pudo hacer más, siendo lo suficiente para quedarse con la victoria, con la que llega a 21 puntos.