COSTA DEL SOL. La expectativa siempre es grande cuando juega la Selección de Playa. El apoyo incondicional y la entrega de la afición para los “guerreros” de arena siempre se hace presente, donde quiera que esté o donde quiera que vaya. Y, sobre todo, cuando se trata de un evento en plenas vacaciones.
Sin embargo, el arranque del torneo playero de C.A., donde los nacionales debutaron ante Panamá, no tuvo un ambiente lleno como era esperado. Fue el primer día, sí; pero la afición no respondió, en plenas vacaciones de agosto, como los organizadores y los mismos jugadores esperaban.
Algunos comentaron que ante la falta de las figuras como Frank Velásquez o “Tín” Ruiz, la afición no se dio cita al estadio costeño porque le hacía falta “algo” extra que los motivara. Parecía que no era lo mismo la selección sin ellos, y por eso el público respondió en menor medida.
Sin embargo, hubo algunos de esos fieles que se tocan el corazón antes que el bolsillo para invertir en ver el fútbol playa, por lo que se sentaron en los graderíos para ver en vivo los goles del grupo que, en esta ocasión, conforma esta Azul.
El que llegó, como siempre, fue el “Indio Cuscatleco”. Puso parte de ese color azul en los graderíos, donde sobraron los espacios vacíos, y donde nada más el sol calentaba cada rincón. Escasas banderas, pero sí camisetas pintaron los distintos sectores. Mientras el aliento y el grito de “gol, gol, gol” aparecía a cada instante. El aplauso fue infaltable.
Los jugadores sintieron ese apoyo, aunque en minoría, de los que se hicieron presentes y por eso no los defraudaron. Los goles se convirtieron en la respuesta ante las dudas de lo que haría este grupo que ahora ha dado confianza Rudis Gallo, y esperan que frente a los chapines, y tras la primera victoria y cuando la vacación se acerca al fin de semana la afición duplique su asistencia.
El espectáculo, seguramente, estará de nuevo garantizado.