COLÓN. Cuando finalizó la guerra, se disparó paulatinamente la delincuencia. Bajo la visión de prevenir y de dar un granito de arena a la construcción de una mejor sociedad, nació la Fundación San Andrés en 1992, con diversos programas en áreas de prevención, reinserción, organización y desarrollo local, salud, equinoterapia, medio ambiente, educación y deporte.
Recientemente, la Fundación dio una muestra más de su apoyo al país, y, en específico, ayudó a Olimpiadas Especiales El Salvador a realizar las pruebas del Campeonato Nacional Ecuestre, con el préstamo de caballos para las competiciones.
Eugenia Vides, gerente general de la Fundación, explicó que “tenemos varios programas, entre ellos, el que nos compete con Olimpiadas Especiales, que es la equinoterapia. A través del caballo, ayudamos a las personas con discapacidad, ya sean niños, jóvenes o adultos”.
Vides explicó que “esta es una terapia increíble, el caballo hace movimientos que ayudan mucho para la recuperación de los jóvenes”.
Paralelamente, “hay otros programas que realiza la fundación, como los relacionados a la prevención de la violencia. Tenemos una academia de fútbol, a la que van niños desde los 5 años hasta los 15, participan, se les enseña, se les dan clases de computación, conocimientos básicos de inglés, aparte de disciplina y constancia”, añadió Vides.
La Fundación también tiene otro programa que se llama Educación Integral Juvenil, en el que están jóvenes desde los 16 años. Reciben 15 horas clases de inglés a la semana durante tres años. “Salen hablando un inglés perfecto, y les da una oportunidad de poder trabajar y de poderse pagar sus estudios. También sirve para prevención de violencia”, acotó la gerente.
“Necesitamos personas, empresas que nos quieran apoyar para poder continuar con esta maravillosa obra de amor, en donde todos los días hay un milagro”, mencionó.
En la equinoterapia, la Fundación recibe a cualquier persona que tenga alguna discapacidad, como parálisis cerebral, autismo, Síndrome de Down, etc. “El especialista nuestro hace las evaluaciones pertinentes para saber qué terapia le conviene. También damos terapia física. Son raras las personas que no puedan optar por ella. La terapista lo evalúa y le hace un plan personalizado”, añadió.
Y aunque tiene un costo, la mayoría están con becas o pagan cantidades muy bajas en relación al costo real. Esto es posible porque “tenemos varios padrinos, varias empresas y personas altruistas que nos ayudan y nos apadrinan a nuestros niños. Ahorita tenemos a Picacho, Fundación Meza Ayau, Alas Dolaras, Textiles Opicos, y se me quedan otros más. Gracias a Dios nos están apoyando”. Así mismo, trabajan conjuntamente con otras entidades como la Alcaldía de Lourdes, que también apoya este tipo de programas. “Estamos ayudando para que este sea un país mejor”, concluyó Vides.