Con las 22 jornadas disputadas del Clausura 2016 quedaron definidas el sábado las cuatro llaves de cuartos de final. Águila enfrentará a Chalatenango; Santa Tecla al Pasaquina, Juventud Independiente irá ante Dragón y el campeón Alianza chocará contra Isidro Metapán. Por los cruces se descartó la final soñada para muchos, un Águila-Alianza como ocurrió en la temporada 1986/87. Si Águila hubiese terminado segundo y no puntero habría sido una posibilidad pero, de superar ambas instituciones sus eliminatorias, se cruzarán en una hipotética semifinal como en el Apertura 2015.
El patrón de equipos se mantiene casi en su totalidad, desde que se implementó el torneo anterior el formato de ocho clasificados. La novedad es Juventud Independiente, equipo al que le vino bien el cambio de administración porque si comenzó la competición a cuatro puntos del descenso fue tercero en esta fase regular. El que no pudo repetir fue FAS, el último subcampeón, luego de ubicarse penúltimo con 21 puntos. Fracasó.
A continuación un análisis de los cuartos de final que comienzan el miércoles. Como ya es habitual, los mejores cuatro (Águila, Tecla, Juventud y Alianza) tienen una ventaja deportiva en caso de que sus series terminen empatadas. La mejor ubicación en la tabla les permitiría avanzar de semifinales. Sin embargo, la última palabra se sabrá el fin de semana. En una serie de 180 minutos todo puede pasar y es como un nuevo torneo, todos empiezan de cero.
Tampoco terminar líder es garantía. El último equipo que fue campeón, tras lograr el primer lugar en fase regular, fue Isidro Metapán en el Apertura 2012. Desde entonces, los últimos seis punteros fallaron en los pronósticos, aunque Metapán llegó a la final en el Clausura 2015 pero perdió en los penales ante el Tecla.
(1) Águila vrs. Chalatenango (8)
Los emplumados recuperaron el liderato, tras perderlo por las últimas tres fechas. Pesó que en el Barraza siguen imbatibles y ya suman una racha de 25 juegos de local sin perder desde abril de 2015. Desde hace cuatro años, Águila no levanta una copa. Su primer obstáculo es Chalatenango que clasificó de rebote porque la UES perdió por diferencia de dos goles en la última fecha.
En este Clausura 2016, Águila ganó la serie particular al empatar de visita 0-0 y luego en el nido propinó una victoria contundente de 3-0.
Ese primer duelo presentaba a un Águila líder y que no había experimentado la derrota, esa que llegaría hasta en la jornada 16. No aprovechó que los alacranes no contaron con el goleador Bladimir Díaz, quien les marcó 4 goles en 2015, por suspensión. Paradójicamente ese Chalatenango se hacía respetar de local y con ese empate logró ampliar a 24 juegos de imbatibilidad de local, racha que conservaba desde el 2009 en Primera.
Para la segunda vuelta, Águila respiraba una tranquilidad porque, aunque había cedido el liderato, no tenía la presión del invicto. En el primer tiempo, Chalate la tuvo y no aprovechó, pagándolo caro porque se descontroló al encajar dos goles en menos de tres minutos con Irvin Valdez y Nico Muñoz. Ya el tercero llegó al 91? con Muñoz, tras un remate de cabeza. Por Chalate quedó en deuda el goleador Díaz.
Fue como una revancha para los migueleños porque en el Apertura 2015 la pasaron mal al caer en el Gregorio Martínez por 3-1 y luego en San Miguel encajaron un gol ‘in extremis’ para ceder un empate 2-2.
A esta serie llega ‘on fire’ Muñoz con tres goles en las últimas tres fechas. Ya suma 13 tantos, dos menos que Bladimir que volvió a marcar el fin de semana, luego de perder su olfato en las últimas cuatro fechas. Lo negativo para Chalate es que llega con una racha de seis juegos consecutivos de no ganar.
Hay un antecedente de eliminatoria entre estos equipos. Fue en el Apertura 2008. Águila fue líder y Chalate se metió de último en el cuarto puesto. Los norteños hicieron valer su loclaía en la ida (3-0) y, aunque cayeron en la vuelta 1-0, disputaron la final pero la perdieron ante Metapán por los penales.
(2) Santa Tecla vrs. Pasaquina (7)
Santa Tecla, que tenía en bandeja de plata cerrar líder en Las Delicias y ante el descendido Atlético Marte, se complicó y bajó al segundo lugar. Su rival llegó de milagro a la cita, Pasaquina, después de hacer su tarea en la última fecha (3-1 sobre Dragón) y favorecido por FAS que impidió que Chalatenango ganara y a Metapán por su triunfo sobre la UES.
Los tecleños llegan en gran forma colectiva. En esta competición solo perdieron un partido y fue en la tercera fecha ante Sonsonate en Las Delicias por 1-0. El equipo del “Pichi” Escudero, luego de esa lección, reaccionó al punto de firmar una marca nueva en los torneos cortos, 19 juegos consecutivos de imbatiblidad, superando los registros que en el pasado dejaron FAS y Metapán (18) así como Atlético Marte (17) y Águila este torneo (15).
Muchas fueron las clave, una de ellas que el equipo no cayó de visitante, logrando 4 victorias y 6 empates. Sus referentes del gol fueron Ricardo Ferreira, como ya es habitual, marcó 8 goles. Pero el equipo no dependió solo de él y se apoyó también en Gerson Mayén (7), Léster Blanco (6) y Luis Hinestroza (6), después que a inicio de torneo perdió a Irvin Herrera, quien fichó para el St. Louis de cuarta división en EE.UU.
En cuanto a sus duelos ante Pasaquina hay un dato curioso. Los burros nunca le han ganado a los tecleños desde su ascenso en 2014. De ocho juegos, empataron cinco y perdió en tres oportunidades. Una de esas derrotas fue este torneo y fue un resultado de escándalo. Tecla goleó 8-0 en Las Delicias el 13 de febrero. El equipo de Hugo Ovelar se cayó anímicamente en el primer tiempo al encajar cinco de esos goles, desde el minuto 7. Anotaron Barahona (2), Kevin Ayala, Ferreira, Hinestroza, Mayén, Baires, Blanco y Baires.
Los burros venían a pique y encadenaron así su tercera derrota al hilo pero luego ante FAS cambiaron radicalmente y ganaron 1-0. Fue un punto de inflexión. Para la segunda vuelta, los burros también venían de dos derrotas al hilo y casi ganan pero Tecla firmó el empate 1-1. Joseph López abrió el marcador al 4? y al 82? Hinestroza encontró la paridad.
Los dos equipos tienen una espina en cuartos de final. Tecla fue eliminado por FAS y Pasaquina por Águila el torneo pasado.
(3) Juventud Indep. vrs. Dragón (6)
Juventud no es el mismo equipo de temporadas pasadas. No es de Opico si no de Usulután. Firpo lo administra y todos sus juegos de local los realizó en Usulután. Por eso su serie contra Dragón es considerada entre equipos de zona oriental. El equipo cambió en su fisonomía. Con la base del Firpo de Segunda División emprendió la misión de salvar la categoría y rápido se alejaron de esa amenaza, de la mano del técnico Misael Alfaro.
Pero cuando terminó la primera vuelta, los toros entraron en una crisis interna. Había salarios pendientes para jugadores y cuerpo técnico y hubo una huelga por cuatro días. Esto sucedió en el mes de marzo pero Santa Tecla quebró la imbatibilidad del Sergio Torres con un 3-0 que lo dejó también sin liderato. Alfaro renunció y la directiva le tomó su palabra. Quien llegó a apagar el incendio fue Mario Martínez, con quien el equipo sumó 19 puntos. Este rendimiento le valió para no salir de los primeros tres puestos.
Su rival es un Dragón que escogió rival. Si no perdía ante Pasaquina, su destino habría sido enfrentar al campeón Alianza, pero desplazado por Metapán. A su DT Omar Sevillla es positivo chocar contra Juventud porque la cercanía le augura que llegue buen marco de público al Barraza en el juego de ida. En cuanto a la serie particular, Juventud salió favorecido con un empate 2-2 y una victoria 1-0 en esta competición.
El primer partido lo pudo ganar el cuadro manudo en “La Caldera del Diablo” pero el argentino Alan Murialdo marcó al 90?. Este jugador fue el mejor artillero del equipo mitológico con 9 tantos. En la vuelta, Mario Martínez fue homenajeado por la gente de Dragón porque no olvidan que en 2013 él les dio el ascenso a Primera. Pero ya en la cancha, “Juve” se quedó con los puntos, luego de que Williams Reyes anotara de penal al 32?.
(4) Alianza vrs. Isidro Metapán (5)
El campeón no podía faltar a esta cita. Alianza encontró el equilibrio después de un inicio muy tenso. Finalizó cuarto y, aunque todo indicaba que le tocaría Dragón, Isidro Metapán cambió esa suerte. Esta serie promete ser muy difícil por la rivalidad que se traen. Tras alzar la copa en diciembre, el inicio fue pletórico para los albos con un triunfo de 3-0 sobre la UES que le dio solo por esa fecha el primer lugar pero en las cinco fechas restantes solo sumó tres puntos y Rubén Alonso fue despedido en febrero.
La transición pasó por dejar como interino por una fecha a Juan Carlos Serrano, auxiliado por Mílton Meléndez, pero la dirigencia confió el equipo al argentino Daniel Fernández desde la fecha 9. El equipo comenzó con derrota ante Juventud en Usulután por 2-1 pero tras ese revés el campeón mejoró sus números. Incluso llegó a tener 8 juegos de imbatibilidad hasta que volvió a perder con Tecla en abril.
El Alianza de Fernández sumó 27 de los 34 puntos. Óscar Guerrero apareció como goleador (8), dejando atrás su primer torneo, el del título, con solo dos tantos. Hérbert Sosa, Rudy Valencia y Juan Carlos Portillo fueron clave. Los capitalinos lograron superar la baja por lesión de su referente en el ataque, Rodolfo Zelaya, quien tuvo una recaída de su lesión pero volvió en el sprint final.
En cuanto a Metapán, si clasificó fue porque despertó en la segunda vuelta al sumar 18 de sus 29 puntos. Contrario al dicho “luz de la calle y oscuridad en su casa”, el jaguar salió a flote porque de local hizo 23 puntos. Nadie lo derrotó en “El Calero” Suárez. Pero el punto flaco para el equipo de Jorge Rodríguez fue que nunca pudo ganar este torneo como visitante. Sacó seis puntos de 11 partidos fuera de casa.
La serie fue pareja en el torneo. En la primera vuelta empataron 1-1 en Metapán. Los cementeros adelantaron en la fecha 2 con gol de Óscar Cerén (22?) pero Juan Carlos Portillo puso la calma al 57?. Pero en marzo cuando se volvieron a encontrar, esta vez en el Cuscatlán, quedaron 0-0 en un partido para el olvido porque jugaron mal.
En la historia, Metapán no pierde en el Cuscatlán ante los albos desde marzo de 2010 cuando sufrió una paliza de 7-1. Sin embargo, Alianza ya no se intimida en “El Calero”. Allí ganó dos veces en 2015 (1-0 y 4-3).