La Copa El Salvador albergará a participantes de la primera, segunda y tercera categoría del fútbol cuscatleco. Esto aportará -al menos desde la lógica- un poco más de ingresos a todos los equipos a partir de los patrocinios, a comparación de los que perciben hasta hoy.
No parece haber un acuerdo de momento para que lo televisen, pero los equipos pueden tener la posibilidad de lucir patrocinios en más lugares. Si se llegara a dar, claramente los equipos de segunda y tercera serán en contraste, hasta hoy en día, los más beneficiados por sostener más juegos de más alto nivel.
Por otra parte, esto también, al menos desde una planificación en conjunto, se divisa como una oportunidad excelente para que los jugadores de las reservas de los equipos, e incluso sus divisiones de Sub 17, puedan tener más minutos y mostrarse. Los equipos deberían apostar más por la profundidad de plantilla, que no significa necesariamente fichar más, sino la posibilidad de potenciar más a los juveniles.
También es una clara oportunidad para ver más fútbol, para la puesta en escena de más duelos como David ante Goliat entre equipos de las tres distintas categorías del fútbol profesional. Será un escenario en donde también se podrá establecer más competencia. No será la solución definitiva para nuestro fútbol, pero es un paso, y uno importante para que deportivamente sin duda todos crezcan.