COSTA DEL SOL. Una vez más, se quedó con las manos vacías. La Selección de Playa no pudo contra Portugal, la selección flamante campeona de la modalidad, y este sábado cayó con la frente muy alta, en un partido de calidad y buen nivel, por 3-4. Los europeos se llevaron a Portugal la IV Copa Pílsener de Fútbol Playa, y dejaron huella en la costa nacional de por qué ostentan el reinado mundial de arena.
Se trató de una auténtica final playera, la misma se vivía desde los graderíos hasta la arena. Una fiesta a la que el entusiasmo se lo puso desde los primeros instantes la selección salvadoreña, que tomó sus precauciones porque sabía qué rival tenía enfrente.
Fue Agustín Ruiz el que tomó la iniciativa con una llegada en apenas tres minutos. Mientras los lusos eran liderados por Madjer, que rotaba como ala y cierre. Además, en siete minutos, con el marcador a cero, la campeona de la modalidad comenzó a probar los reflejos del portero Herbert Ramos, con un tiro libre de Rui Coimbra y un disparo de Madjer y otro de Nuno Belchior.
La selección salvadoreña tenía marcas individuales sobre los portugueses, con lo que lograban robar balones, ante el buen toque en paredes que hacían los visitantes.
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Pero como las individualidades siempre son aplaudidas por la afición, fue hasta los nueve minutos en que Frank Velásquez estuvo cerca de abrir el marcador, con un remate que se abrió y se fue a un costado de la meta de Tiago Petrony.
La tensión comenzó a crecer con algunas faltas en ambos equipos, y los tiros libres que al final terminaron por reventar las redes. El Salvador se puso adelante primero, con un tiro libre de Rubén Batres, que trató de contener Petrony, pero el balón se levantó y entró para besar la red. Parecía que el panorama iba encaminado, hasta que José María Fonseca puso el 1-1, un minuto después. Recibió una prolongación desde la derecha y con la frente empujó el balón para irse al descanso en igualdad.
Mandó Portugal
Los “guerreros” de playa lo siguieron intentado para el segundo periodo, con una chilena de Batres, recién reanudado el juego. Portugal dominaba bien la figura del cuadrado, con lo que el balón lo hacía transitar y tocar por todos sus sectores.
Frank volvió a animarse a los tres y cuatro minutos, con disparos a puerta que no lograron definirse. El más claro fue el de una chilena que pegó en el poste derecho de Elinton Andrade, guardameta luso que llegó a la segunda mitad, y que en el segundo toque servido por Melvin Segovia y punteado por Frank salió desviado.
Si los salvadoreños no se rendían en busca de adueñarse de la arena, Portugal había mantenido el nivel, cuidadoso por momentos y preciso en otros, sobre todo para orientar más de tres toques. Esto les dio paso para encontrar el espacio y golpear de nuevo. Nuno Belchior sirvió balón a Coimbra, que definió el 1-2 (6’).
No pasó mucho tiempo para que la afición despertara y gritara a pulmón el doblete de Frank, que de cabeza, por el costado derecho, pondría a tres minutos de cerrar el periodo. Dejaba la sensación la selecta de que era superior, porque dominaba y apretaba el acelerador, pero Portugal llegaba mucho más rápido al ataque, era más ligera y suelta, aún y hasta con dos marcas sobre Coimbra o Fonseca.
Al cierre de esta parte, Herbert Ramos tuvo una opción, desde su arco, con un disparo potente, que levantó al público, pero que Elinton desvió al tiro de esquina.
Estaba claro que el cuadro europeo no se iba a regalar, con todo y la presión que recibió de la afición. Sin embargo, fue hasta una pelota a balón parado en que logró tomar la batuta en el marcador. Fue Madjer el que descontó, al hacer efectivo un tiro libre desde la derecha (3’).
Los pupilos de Rudis Gallo no renunciaron, pero se les pintó complicado pelear por el empate, hasta que lo lograron el 3-3 por intermedio de Heber Ramos. El 3 nacional, hasta ese momento de peso más bien defensivo, hizo efectivo un tiro libre, con un derechazo al ángulo inferior de la puerta lusa (7’).
Para desfortuna cuscatleca, duró poco la paridad. Apareció Belchior, sesenta segundos después, y definió un trazo colocado abajo para el cuarto (3-4). El resultado llevó a la tensión de El Salvador de no rendirse. Pero los tres minutos finales, jugó más adelantado Portugal, que sentía cerca la copa ya de casa. Y lo concretó.