Es lo más conveniente. La Selección no gana un partido desde que llegó a la dirección técnica, hay evidencias de un grupo dividido, la dirigencia no lo respalda categóricamente, no hay muestra alguna de un equipo con identidad y sin embargo, la continuidad de Ramón Maradiaga es lo más conveniente.
Para una Federación que tiene asuntos más urgentes que resolver que la elección de un nuevo entrenador nacional, que el Primi siga al frente es lo más favorable.
El dirigente de la FESFUT está acostumbrado a utilizar a la Selección nacional para distraer la atención de los asuntos más importantes del fútbol. No hay nada que mejor aparente que el dirigente “trabaja” que comenzar la búsqueda por un entrenador para la Selecta. Desde el 2010, el viciado proceso de elección del técnico nacional se ha repetido hasta en ocho ocasiones.
Esta vez, por alguna conveniente y curiosa razón, no han filtrado el monto del contrato de Maradiaga. Desde el momento en el que protegen el contrato (ligeramente menor al de su antecesor) y se resguarda el convenio, el Primi debía estar tranquilo. La decisión de retenerlo estaba tomada antes del cónclave del jueves pasado. No utilizaron a sus escuderos de las radios para repetir las cacerías de los últimos años.
Lo más conveniente para el fútbol nacional era la continuidad de Maradiaga. Así no encienden la maquinaria mediática que protege a la FESFUT. La misma que ha callado los detalles del contrato del actual DT y decide cortar con la costumbre de generar un ambiente negativo en su contra.
Lo hacen porque a la FESFUT, no le conviene que Maradiaga se vaya. Financieramente es una institución quebrada, no tiene recursos para cumplir con la rescisión del contrato del entrenador y pasa por una seria crisis económica. Una pésima gestión ha visto crecer el plantel administrativo de la FESFUT a un tamaño que la obliga a destinar la mayoría de sus precarios fondos, para el cumplimiento de obligaciones laborales.
Una de las federaciones de fútbol con más empleados en Centroamérica, es una de las Federaciones que menos recursos genera. Esto es lo verdaderamente relevante. La Selección, su entrenador, sus jugadores y hasta su forma de juego, se ha convertido por años en el mejor agente distractor de los asuntos de verdadera relevancia para el fútbol nacional: la organización.
Que siga Maradiaga evita que las vetustas voces que sirven de escudo para la FESFUT, comiencen con el insulso debate sobre un sucesor. El fútbol nacional debe atender asuntos de mayor relevancia que esos. La forma en la que se gestiona la FESFUT es uno de ellos.
Una organización gigantesca que no genera recursos, ni financieros, ni deportivos. A la Federación le corresponde mirarse al espejo y refundar las maneras de hacer gestión deportiva. El fútbol, como juego, se debilita. Víctima de la inoperancia dirigencial que ha considerado que, temas como la elección de un entrenador para la selección nacional, son los temas de verdadera relevancia.
Que siga el Primi es lo más conveniente, así hablamos de cosas importantes.