MADRID. El gran día de Zinedine Zidane como técnico llega con el salto al primer equipo del Real Madrid como sustituto de Rafa Benítez, un movimiento que ha devuelto la ilusión al madridismo, y que tendrá como primera prueba al equipo revelación de la Liga, el Deportivo de La Coruña, que ha pasado de salvarse en la última jornada del pasado curso a luchar por Europa.
“Voy a tratar de seguir mi juego como entrenador”. La promesa del fútbol ofensivo y de espectáculo de Zidane, añadido a su figura respetada y querida en el madridismo, ha devuelto la ilusión a la afición del Madrid. El Santiago Bernabéu volverá a llenarse para el arranque de un nuevo proyecto que cambia las ideas instaladas por Benítez, para recuperar la confianza desde la posesión de balón y un fútbol vistoso.
Después de desperdiciar dos ocasiones de acortar distancia con el Barça, tras pinchazos del eterno enemigo que dieron paso a fallos del Real Madrid, el calendario juega a favor de Zidane, que tendrá tiempo, con un partido a la semana, de mejorar a sus jugadores e instalarse en una dinámica de resultados positivos sin cruzarse con ningún rival grande de la competición.
Con la presencia de la ‘BBC’ (Bale-Benzema-Cristiano Ronaldo) asegurada desde su primera comparecencia y apostando por estar cerca de los futbolistas, para que entiendan decisiones complicadas, todo indica a que las primeras perjudican a Raphael Varane y James Rodríguez, que se perfilan suplentes ante el Depor.
Con Isco desaparecido de los equipos titulares de Benítez y sin un solo minuto en los tres últimos juegos, el primer objetivo de Zidane, tras evitar su salida del club, es que recupere su confianza. Se perfila titular.
En la primera convocatoria del nuevo técnico blanco no está Nacho. Tampoco Arbeloa y Cheryshev, por decisión técnica de “Zizou”.
Mientras, el Deportivo con el aval de su empate a dos en el Camp Nou ante el Barça en diciembre, visita este sábado el Bernabéu dispuesto a amargar el debut de Zidane como técnico blanco y reponerse de la derrota que encajó el domingo pasado ante el Villarreal (1-2), frente al que rompió una serie de ocho partidos sin caer en Liga.
El conjunto coruñés lo afronta como un reto que le motiva, como los dos últimos en el Camp Nou, y, además, ya tiene experiencia en colarse en una fiesta del Madrid, la Copa del ‘Centenariazo’, precisamente con su actual entrenador, Víctor Sánchez del Amo, y Zidane, ambos como jugadores.
El Deportivo solo ha perdido tres partidos de Liga, como su rival, y no cae a domicilio desde el 24 de octubre ante el Málaga (2-0).
Sánchez podría repetir alineación por tercera jornada consecutiva, con Lucas Pérez como referencia ofensiva. El coruñés, máximo goleador del equipo con 12 tantos, es la principal amenaza de los deportivistas, aunque no ha visto puerta en los dos últimos partidos.
Arranca la ‘era Zidane’ ante uno de los equipos frente al que firmó uno de sus tantos más bonitos. Bailó sobre el balón con dos recortes en un palmo, el segundo pisando el esférico antes de un latigazo a la red. El Bernabéu vuelve a ilusionarse. Se acabaron los silbidos para el técnico. La esperanza vuelve a instalarse.