Con Pasaquina celebrando sus fiestas patronales, el torneo Clausura se dio por iniciado y con una feria de goles, en el empate (3-3) entre burros y cocoteros, que no pudieron aguantar una doble ventaja hasta el final.
Buen marco de público, una temperatura fuerte, fueron parte del ambiente que se vivió en este primer partido del campeonato, que generaba muchas expectativas con dos equipos que se perfilan a estar dentro de los ocho.
Pasaquina estrenaba técnico, el paraguayo Hugo Ovelar, quien se estrenaba en el fútbol salvadoreño y ante un equipo que sufrió pocas variantes para este torneo, pero al que le intentó imponer su estilo de juego, el cual tomó pesó en los primeros instanes, desbordando por las bandas, ganando línea de fondo y metiendo algunas centralizaciones.
Mientras que Sonsonate, con la continuación técnica de Edwin Portillo y con algunas contrataciones llamativas, trató de superar esta visita difícil, pues desde su arribo resintieron el fuerte calor.
Los cocoteros lamentaron no poder contar con Paolo Suárez, por cuestiones administrativas (ver recuadro), poco a poco se fue acomodando a la cancha. Aguantó los primeros instantes, pero logró abrir el marcador a los 15 minutos, gracias al gol en propia meta de Juan José Orellana, tras un tiro libre de William Guerrero, quien lo convirtió en un centro al área, que ante la complicidad de la defensa y el portero local, terminó pegando en la espalda del zaguero pasaquinense.
Para el segundo tiempo, Pasaquina arriesgó y encontró rápido la paridad, con un cabezazo de Kevin Sagastizado, quien se les perdió a sus marcadores, para quedar solo y definir el centro por la izquierda (51’).
Un gol que generaba satisfacción a los locales, pero que duró poco porque Sonsonate recuperó la ventaja, por medio del colombiano Óscar Móvil, quien anotó tras el balón que soltó el portero Vega (52).
Mauricio Quintanilla anotó el tercer gol cocotero, con un remate fuera del área, tras un centro por la derecha, en el atenimiento defensivo, al no llegar a tiempo para la marca y el rechazo (62’).
Pasaquina tuvo descontrol, pero mantuvo el coraje y con eso pudieron rescatar el partido que parecía perdido. Un envión dio el descuentó que anotó Yuvini Salamanca con un disparo de larga distancia, que dejó sin chanche al portero cocotero, Julio Martíne (69’). Después vino la expulsión de Iván Barahona, por doble amonestación en una jugada confusa (71’). Pero que le dio más ánimos a los pasaquineneses, que después de tanto insistir pudieron empatar (3-3), con una volea de Joseph López, para un resultado que fue celebrado como victoria para los locales.