Un ambiente no tradicional en Usulután: bastante fresco y con una fuerte brisa, que por momento complicó el trayecto de la pelota. Un duelo bastante estratégico, con varios tramos de buena dinámica, parejo y de pocas ocasiones claras a gol, pero de las que Juve necesitó dos para sentenciar el partido, guidados por el “eterno” Williams Reyes.
Juve hacia su presentación en la “Caldera del Diablo”, en donde la música y los canticos estuvieron a cargo de los visitantes, con la Turba Roja, pues de los locales no hubo ninguna barra que metiera un apoyo especial al equipo usuluteco (ver recuadro).
Pero sin ese tipo de motivación, Juventud tomó la iniciativa en el partido y generó la primera de peligro con un tiro libre que Marvin Ramos cobró directo, cerca del área grande, que exigió abajo al portero Adolfo Menéndez (3’).
La respuesta tigrilla llegó unos minutos después, después de una jugada colectiva, que le permitió penetrar a Jonathan Jiménez, por la izquierda, para casi hasta el área chica, donde sacó un remate de zurda, que Fidel Mondragón rechazó por un costado (10’).
Después de eso vinieron otras jugadas similares, con lo que los dos equipos tuvieron algunas llegadas, sin mucha claridad. Poco a poco el juego pasó a tener un trámite de mediacancha, con dos duelos marcados entre creación y marca: Marvin Ramos, de los manudos, ante el contención tigrillo, Raúl Renderos. En el otro sector, Jorge Morán, de FAS, se midió frente a Jhony Ríos.
Cuando la pelota no pasaba por Ramos y Morán, este se volvió en un duelo de pelotazos, al que tampoco le sacaron mayores provechos, pero los tigrillos marcaron diferencia con el juego lateralizado, al recorrer la banda derecha donde Fernando Castillo metió algunas centralizaciones, pero que terminaban con el rechazo de la defensa.
El primer tiempo terminó con los dos equipos conservándose, no arriesgando mucho y quedando con muchas conclusiones que analizarían en el medio tiempo, pues cada cuerpo técnico estaba muy atento a sus apuntes, previo a la charla.
Otro ritmo
Quizá durante el descanso los dos equipos se actualizaron con los marcadores de los otros partidos, donde en ese momento Águila y Metapán estaban en ventaja. Eso obligó a que Juventud y FAS salieran a arriesgar para el complemento.
Otra vez volvieron a ser los pamperos en generar las primeras llegadas, con algunos balones en profundidad con el que buscaban a los delanteros.
Ahora los usulutecos habían tomado la manija del partido, reteniendo con mejor idea la pelota, realizando un constante desmarcaje para abrir espacios y habilitar al jugador que llegaba por atrás desarrollando mejor juego colectivo.
Así fue como después de una serie de toques, apreció César Flores y en una individual entró al área, hasta que fue derribado por zaguero tigrillo, por lo que se sancionó penal a favor de los manudos, que Williams Reyes convirtió en gol, con un toque suave y raso, que engañó a Fito Menéndez (64’).
FAS no tuvo poder de reacción, con sus intentos sin claridad frente a la portería pampera. Más alta se volvió la cuesta para los santanecos cuando los manudos logaron el segundo tanto, con el cierre de Reyes, tras un disparo de Ramos, que pegó en el poste; y que el goleador definió de pierna derecha (75’).
Diez minutos después llegó el tercer tanto, siempre a través de Reyes, con un balón en profundidad que le permitió al delantero entrar al área y definir cruzado a Fito Menéndez, quien poco pudo hacer para evitar la anotación.
El grito de “Firpo… Firpo… Firpo…” fue más constante para el cierre del partido, con una victoria que los llena de alegría, satisfacción y esperanzas. Mientras FAS, tendrá muchas conclusiones para analizar.