Mientras los tecleños gozaban con la goleada, los burros sufrían. Fue tanto el malestar, que la dirigencia tuvo que intervenir, primero con una charla a orillas de la cancha del estadio Las Delicias y después, con todo el plantel en el camerino de este escenario.
Según Abilio Menjívar, lo que conversaron con el equipo fue para tomar algunas decisiones, como la de “respaldar al cuerpo técnico” e informar que tomarán “algunas medidas disciplinarias contra los jugadores”.
“Esta situación fue catastrófica. Hemos hablado de los problemas internos que vive el club, hemos puesto las cosas bien claras, hemos señalado los problemas y a partir de estos vamos a ejecutar algunas multas con algunos jugadores y con todos aquellos que no quieran estar al cien con el equipo. Como directiva nos hemos solidarizado con el profesor Ovelar y todo su cuerpo técnico tiene el apoyo total”, explicó Menjívar.
De la parte deportiva, el técnico Hugo Ovelar no tenía explicaciones sobre esta derrota en Santa Tecla: “No se puede encontrar una excusa para una derrota como está. Lo único que nos resta es trabajar, levantarnos para salir de esto. Pero no solo con este partido, estamos viviendo una mala racha donde en los últimos momentos se nos fueron. Ahora tenemos que recuperar a algunos físicamente, porque se nos estamos cayendo el equipo, tras los juegos fuertes”, mencionó
Esta fue la tercer derrota consecutiva del equipo, que ha cedido terreno en los primeros puestos de la tabla, donde el equipo estaba escalando de manera gratificante, pero que para el DT terminó afectando en lo psicológico del plantel.
“Creo que algunos de nuestros jugadores se les subieron el humo, con ocho puntos, que no hemos ganado nada. Pero bueno, así son las cosas, ahora a tratar de levantar las cosas y el fútbol da muchas revanchas. Ojalá lo que hemos peleado desde el principio, lo podamos recuperar para pensar en la clasificación”, dijo.
Ahora, Pasaquina se alistará para recibir a FAS, el próximo sábado, donde esperan reivindicarse de esta derrota y del mal momento que viven para no perder la idea de los objetivos.
“Lo que puedo decir es que no estamos llegando a la altura que tendríamos que estar, como para pensar estar en la final. Este partido nos demostró lo mal que estamos, un resultado catastrófico y ojalá que con esto puedan asentarse nuestro jugadores y que ellos mismos puedan hacer un autoanalisis, para levantar cabeza”, señaló el técnico paraguayo.