Parecía un encuentro tranquilo y ameno. Pero hubo um conato de bronca entre las dos Furias, la Calera y la Pampera de San Salvaodr, y que empañó jn poco el bjen espectáculo que se pudo ofrecer en un ríspido 1-1 que se cocinó anoche en el estadio Calero Suárez.
Un aficionado saltó al campo, cua do faltaban 15 minutos para inkciar el partido, y que vestía una sábana donde se alcsnzaba a leer el número ordinario “2da.”, aderezado de cantos provocadores contra la barra del equipo tricolor. En otras, palabras, le recordaban a Juventud-Firpo su paso por Segunda División y la reciente compra de categoría.
Era lo menos que podía enfurecer a los hinchas taurinos. De estos, algunos brincaron también al césped y retaron de vuelta a los hinchas blanquiazules, que a estas alturas ya no aparentan ser barra pacífica que alguna vez conocimos. Intervino la Policía nacional Civil, que contuvo a los tricolores hasta devolverlos a su sector del estadio. Hasta se acercó el DT calero, Jorge Zarco Rodríguez, para intentar apaciguar a los visitantes.
Pero fue lo único lamentable. Quedaron olvidados los cs tos de provocación alusivos a la Liga de Plata. Pro to reinó el ruido y los gritos futboleros, que ahogaron al estadio en un escándalo de bombos y platillos, al compás de otro partido más táctico y menos vistoso sobre la cancha.
Eso sí: un trapo quedó extendido en todo el primer tiempo y decía “$egunda + dinero = Firpo”. Provocador.