El fútbol seguirá llegando a los niños opicanos. Pero esta vez, sumando una mejor oportunidad. Esa misma que la Fundación Educando a un Salvadoreño (Fesa) y la empresa Hanes Brands Inc establecieron ayer, con la inauguración de una cancha y una alianza entre ambas instituciones, para que más chicos sigan practicando este deporte en el país.
El Complejo Deportivo ha sido nombrado “Viviendo Verde”, mientras el convenio firmado en presencia de padres de familia y niños que formaran la primera escuela de fútbol integral de fútbol “permitirá la implementación de un novedoso programa de ‘Responsabilidad Social Empresarial’, cimentado en el deporte”, informaron.
Durante el acto, que contó con algunas prácticas de entrenamiento de los alumnos y la animación de una banda musical, permitió la develación de la placa y el corte de la cinta de un inicio esperanzador. Así lo expresaron los representantes de Hanes, y Jorge Bahaia, presidente de Fesa.
“Aquí se logran tres cosas: la primera, introducirle al niño, el deporte, importante para que no incursionen en las maras, delincuencia o drogas; segundo, el deporte es un vehículo de formación, aprenden a trabajar en equipo, esforzarse y disciplina; y por último, es la integración con la familia”, manifestó Bahaia.
Según explicó, con este convenio se logra “construir la cancha y que exista una escuela para los hijos de los trabajadores y los niños de la comunidad de Opico, donde Fesa va a administrar la parte de fútbol, implementando no solo entrenamiento técnico-deportivo, sino también el modelo Fesa, con charlas de valores y escuelas de padres”.
Y, en una segunda etapa, “utilizar el complejo para impulsar el programa de educación física e invitar a los niños de las escuelas para que la practiquen aquí y poder identificar talentos en fútbol y en otros deportes”, señaló.
Mientras René Villarreal, vicepresidente de operaciones de Hanes, declaró: “Estas actividades tienen como fin ayudar a la comunidad donde estamos funcionando. (…) Estamos asumiendo el compromiso de apoyar la comunidad donde operamos, tratando de formar buenos ciudadanos”.
La alcaldía de Opico agradeció la creación de esta escuela. Y los pequeños quedaron felices porque, de ahora en adelante, podrán jugar fútbol más tranquilos y se formarán como mejores personas.