Sin despeinarse y hasta con un fútbol a medio gas, el campeón Santa Tecla salió con un gran negocio de la cueva del tigre, al empatar a cero en casa anoche ante un FAS sin sangre en las venas, sin alma y sin garras, en el juego de ida de cuartos de final del Apertura 2015.
La afición tigrilla no se hizo presente en buen número al Óscar Quiteño, que estuvo, a lo mucho, a un 35% de su capacidad. Para nada una fiesta de cuartos de final, una muestra más del descontento que existe entre la fanaticada tigrilla por los últimos resultados, y con su dirigencia.
El partido, como en las gradas, tuvo un primer tiempo pálido y triste. Pocas jugadas de peligro en ambos pórticos y dominio alternativo, a pesar de que era FAS el llamado a proponer más, al ser local.
Los rojiazules salieron con un 4-3-3 en teoría ambicioso, pero que no logró poner en problemas al fondo tecleño en la primera etapa. El peruano Alberto “Chochera” Castillo mandó a Mendoza, García y Mejía en el fondo; Álvarez y Renderos para destruir en la media y alimentar a Morán (creativo suelto) y a “Chalatío” Lemus y Marroquín en las bandas. Adelante, “Puma” Peña y el movedizo hondureño “Pery” Martínez, quien fue el jugador más activo en los primeros compases.
Santa Tecla, que venía de ganar 5-0 en este campo santaneco en su última visita, llegó a proponer su fútbol abierto, con un 4-4-2 equilibrado.
En la línea defensiva, el argentino Osvaldo Escudero colocó a Ayala-Domínguez-Mancía-Barahona; solo Chavarría como contención, más Cornejo y Moreno por los costados. Mayén, un ex tigrillo, era el llamado a ser el creativo; más los sudamericanos Giménez y Ricardinho en busca de los goles.
Ambos sistemas ofrecieron poco fútbol y menos emociones. Un disparo lejano del “Pery” Martínez más otro cabezazo del catracho. Y hasta ahí. Lo demás, flojos intentos. Hubo más kickboxing y boxeo que fútbol, porque la primera etapa terminó con cinco amarillas: Mendoza, Álvarez y Renderos terminaron pintados de amarillo, además de los tecleños Ayala y Barahona. Una muestra de lo apretado y cerrado del juego, más ríspido que atractivo para las gradas. Desde las gradas, silbatina.
Para la segunda etapa, Escudero salió a ganar el partido. Sacó a Giménez y a Moreno y puso en el campo a Herrera y al colombiano Luis Hinestroza, que se había despachado un “hat trick” la última vez que estuvo frente al “Motor”. Y ya en la primera jugada del segundo tiempo, una pelota le quedó a Herrera solo frente al marco, pero la mandó a las nubes.
Después, más sufrimiento tigrillo en un cabezazo de Mancía, en un tiro de esquina, que pasó cerca del poste derecho de Contreras; y la movilidad de Hinestroza comenzaba a hacer daño, y casi conecta con otro testarazo de Herrera, al 55’, que le salió a las manos de Contreras.
FAS no se veía con muchos argumentos para responder, pero lo hizo con un disparo de lejos del “Samurai” Álvarez, muy arriba, al 57’; más algunas jugadas de riñón y en solitario del “Puma”. Tuvo algunos tiros libres y otros acercamientos, pero hasta ahí. Al 74’ comenzó una lluvia de rechiflas en las gradas, en exigencia a Castillo para que hiciera cambios. Envió a “Café” Mendoza a diez minutos del final, pero el colombiano apenas tocó la pelota; sí estuvo cerca Álex Mendoza en un córner al 86’, pero no logró definir; y asustó el ingresado García al 88?, con tiro cerca del poste.
Muy poca hambre para el tigre –dueño de 17 copas de campeón en sus vitrinas- ante el vigente monarca nacional, que tendrá la ventaja de cerrar en Las Delicias en busca de la semifinal.